Condenado a 4 años un preso de Valladolid que ocultaba droga en los calzoncillos y en un huevo Kinder

Actualizado: martes, 31 enero 2006 18:55

VALLADOLID, 31 Ene. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia de Valladolid ha impuesto una pena de cuatro años de prisión al recluso de origen venezolano Mario V. como autor de un delito contra la salud pública cometido en abril de 2005 cuando funcionarios del Centro Penitenciario de Valladolid, donde se hallaba interno, le sorprendieron en posesión de una pequeña cantidad de heroína y 76 pastillas de Alprazolam que ocultaba en el forro de sus calzoncillos y en el interior de un huevo Kinder.

En su fallo, la Sala considera probada la autoría del delito y, junto a la pena privativa de libertad, acuerda imponerle igualmente el pago de una multa de 269 euros, equivalente al valor de los fármacos incautados, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.

Durante el juicio, el acusado negó que los funcionarios le hubieran ocupado sustancia alguna cuando sobre las 19:45 horas del día 20 de abril del pasado año se hallaba en el patio del Modulo 4, al tiempo que precisó que tal circunstancia era imposible pues llevaba un año en el Centro Penitenciario de Valladolid y durante ese periodo no había recibido ni visitas ni paquetes del exterior.

Al margen del testimonio del ahora condenado, quien cumple condena de 9 años por delito contra la salud pública dictada el 24 de julio de 2000 por la Sección 3 de la Audiencia de Madrid, comparecieron también los funcionarios de la penitenciaria vallisoletana que participaron en el registro del reo.

CORRILLOS SOSPECHOSOS

De entre estos últimos, el testimonio más contundente fue el del funcionario que dio la orden de registrar al reo tras observar "ciertos movimientos sospechosos, corrillos y cuchicheos" en el patio del Módulo 4. El testigo recordó que llamó a Mario V. para que se acercara y fue el momento en que éste comenzó a correr, con lo que otros funcionarios se vieron obligados a reducir al preso y, a la fuerza, trasladarle al Módulo 7 para registrarle en profundidad.

En el trayecto--continuó el declarante--el interno soltó un huevo kinder que llevaba en la mano, en cuyo interior ocultaba 26 pastillas de Alprazolam y catorce envoltorios con 0,36 gramos de heroína, y acto seguido, durante el registro más en profundidad en el Módulo 7, los funcionarios descubrieron que en el forro del calzoncillo escondía otras 50 pastillas de la misma composición que las anteriores, todo ello por valor de unos 269,28 euros.

La representante del fiscal, que inicialmente pedía tres años de cárcel por tentativa de delito de tráfico de drogas, modificó al alza sus conclusiones y elevó la pena a cuatro años por delito consumado, con la agravante de reincidencia y haberse realizado en un centro carcelario, tal y como ha estimado finalmente la Audiencia provincial.

El defensor, por su parte, solicitó una sentencia absolutoria y consideró igual de creíble que la droga perteneciera a otro recluso o que incluso la misma fuera para autoconsumo de su patrocinado. Además, y como anécdota, advirtió de que no es posible condenar a Mario V. por cuanto la acusación no se dirige contra él, en referencia a que el escrito de calificación del fiscal contiene un error pues el primer apellido, de inicial H, no se corresponde con el del encausado.