Consejo.- Autorizadas las obras del enlace entre la Autovía del Baix de Llobregat y la AP-7 con cerca de 60 millones

MADRID 29 Dic. (EUROPA PRESS) -

El Consejo de Ministros ha autorizado al Ministerio de Fomento a licitar las obras del enlace entre la Autovía del Baix Llobregat y la Autopista AP-7 (antigua B-30) en Castellbisbal, provincia de Barcelona, con una dotación de 59.250.309,61 euros. La conexión tiene una sección de autovía, cuyo tramo principal de enlace tiene una longitud de aproximadamente un kilómetro.

La vía de enlace parte de los ramales que conectan con las calzadas de la Autovía del Baix Llobregat (A-2), en sentido Tarragona y Lleida y que cruzarán el río Llobregat de manera independiente.

El tronco, cuyo comienzo se apoya en el vértice del polígono industrial de San Vicente, gira después a la izquierda y cruza la riera de Rubí y las infraestructuras ferroviarias correspondientes a la Línea de Alta Velocidad Madrid-Barcelona, la línea doble de tráfico mixto Renfe y la línea de mercancías de Renfe. Posteriormente, el tronco del enlace discurre en dirección norte, paralelamente a la riera, bajo las estructuras existentes en la AP-7.

Además, se proyecta un enlace con la carretera C-1413 de Vic a Molins de Rei, con la construcción de una glorieta elevada sobre el tronco de la vía de enlace, la cual discurre paralela a la riera de Rubí, en dirección norte.

Tras cruzar bajo las estructuras existentes en los ramales de la AP-7 correspondientes a los movimientos Barcelona - Tarragona y Girona -Tarragona, la vía de enlace gira hacia la derecha conectando con las calzadas de la autopista. Previamente, la traza discurre bajo la estructura existente en el ramal Girona - Barcelona de la AP-7.

Tras cruzar esta estructura, las calzadas de la vía de enlace se separan y conectan de manera independiente con las calzadas existentes de la AP-7. Así, la calzada derecha cruza sobre el ramal Tarragona-Girona de la AP-7 por medio de un paso superior, discurre posteriormente paralela a la margen derecha de la AP-7 y conecta, finalmente, con la citada autopista. Se dispone, además, de un carril de aceleración de 500 m de longitud en la margen derecha de la AP-7.

La calzada izquierda comienza con una ampliación en el número de carriles existentes en la AP-7, pasa de cuatro carriles a cinco. La ampliación se produce por el exterior de la calzada izquierda. Posteriormente, este carril exterior se bifurca de la autopista y da lugar a la calzada que conectará con el tronco de vía de enlace a proyectar, coincidiendo sensiblemente con la bifurcación existente en la AP-7 entre las calzadas que dan servicio a los movimientos Girona - Tarragona y Girona - Barcelona.

El trazado de la calzada izquierda discurre posteriormente paralelo a la calzada derecha en planta y, tras cruzar bajo la estructura existente en la AP-7, conecta con el tronco principal de la vía de enlace.