VALENCIA 1 Mar. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Territorio y Vivienda, Rafael Blasco destacó hoy en la inauguración de la Jornada "Innovación para la Sostenibilidad del sector cementero", en el marco del VI Coloquio de Directores y Técnicos de Fábrica de Cemento, el compromiso ambiental de las empresas cementeras de la Comunidad Valenciana destacando, entre otros, los acuerdos sobre eliminación de harinas cárnicas.
La industria cementera valenciana, que da empleo a 5.400 trabajadores entre puestos directos e indirectos, ha invertido en los últimos tres años más de 11 millones de euros en medioambiente, según señalaron esta mañana en Valencia durante el VI Coloquio de Directores y Técnicos de Fábricas de Cemento, que inauguró el conseller de Territorio y Vivienda, Rafael Blasco, y el presidente de la Agrupación de Fabricantes de Cementos, Ignacio Madridejos.
El conseller aseguró que "el buen comportamiento de este sector es fundamental para cumplir con el protocolo de Kioto en la Comunidad ya que dos de estas empresas, dedicadas a la fabricación de cemento, concentran el 35% de los derechos de emisión en nuestro territorio". Se estima que el 40% de las inversiones de este sector son de carácter medioambiental, especialmente, encaminadas a reducir emisiones a la atmósfera.
La Comunidad Valenciana dispone de tres fábricas de cemento y más de 200 plantas de hormigón que generan 1.600 empleos directos y 4.800 indirectos. La producción total es de 6,95 millones de toneladas, aproximadamente un 15% del total que se elabora en España. De esa cantidad, cinco millones provienen de fábricas con el proceso de fabricación integral.
El resto se elabora en las plantas de molienda, donde sólo se mezcla el clínker importado con aditivos. Además, la Comunitat es la mayor productora de cemento blanco del mundo con proyectos arquitectónicos emblemáticos como la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia o la ampliación de diferentes instalaciones portuarias. El consumo per cápita es de 1.300 kilos al año, lo que implica que en el total de la Comunitat se llega a la cifra de seis millones de toneladas.
El presidente de Oficemen, Ignacio Madridejos, apuntó que el sector cementero español ha disminuido en los últimos 25 años su consumo energético en un 40%, lo que le convierte en uno de los más eficientes junto a Japón y Corea. Las industrias cementeras invierten anualmente 100 millones de euros, lo que repercute en una disminución considerable de emisiones de CO2 a la atmósfera
Desde la Generalitat "se está trabajando intensamente en todos los aspectos relativos a la aplicación de las normas reguladas como consecuencia del protocolo de Kioto, asesorando a las empresas y adoptando futuras estrategias", según Blasco.
De ahí, agregó, "la puesta en marcha de la Ley de Prevención de la Contaminación y Calidad Ambiental que tiene como principal objetivo facilitar a las empresas mecanismos de acción preventiva en materia de contaminación de origen industrial".
Esta futura Ley, dijo el conseller, "será pionera en el Estado Español en cuanto a la aplicación de un modelo de intervención administrativa-ambiental, regulando la concesión de la autorización ambiental integrada, máximo certificado ambiental, dirigida a regular las actividades de mayor potencial contaminador, entre las que se encuentran las industrias minerales, y concretamente la fabricación de cemento".