Cs se plantea adoptar el modelo bicéfalo del PNV y Arrimadas solo sería la candidata en las próximas generales

Archivo - La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas (2d), y el vicesecretario general de Ciudadanos y portavoz en el Congreso, Edmundo Bal (1d), en una concentración de apoyo a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en Alsasua (Navarra).
Archivo - La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas (2d), y el vicesecretario general de Ciudadanos y portavoz en el Congreso, Edmundo Bal (1d), en una concentración de apoyo a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en Alsasua (Navarra). - Eduardo Sanz - Europa Press - Archivo
Publicado: lunes, 14 noviembre 2022 18:43

Avanzan que la intención de Arrimadas es presentarse a las elecciones y que tendrá que pasar por primarias

MADRID, 14 Nov. (EUROPA PRESS) -

Ciudadanos ha abierto la puerta a cambiar su estructura en el marco de la refundación iniciada tras sus malos resultados electorales y va a plantear una bicefalia para que el partido se divida en dos direcciones, al estilo del PNV: una orgánica y otra política. Así, desaparecería la presidencia e Inés Arrimadas, que solo lideraría la parte política, sería candidata a las elecciones.

Fuentes del partido 'naranja' han señalado que esta propuesta, que tendría que ser respaldada por la militancia y está inspirada en los partidos liberales europeos, busca separar las funciones de una forma clara y "proteger" a Arrimadas, su "mayor activo político".

La dirección orgánica gestionaría el día a día a nivel interno, en tanto que la dirección política, liderada por Arrimadas, se dedicaría exclusivamente al discurso y al contacto con la calle. Una bicefalia de poder que, según las fuentes, se parecería a la del PNV, cuyo presidente es Andoni Ortuzar, pero el Lehendakari y candidato a las elecciones vascas es Iñigo Urkullu.

Este cambio de estructura, han continuado, se hace para "honrar" el proceso de refundación. Asumen que será un cambio de estatutos y una "revolución", para que Arrimadas esté al "100%" dedicada al discurso político y a recorrer España junto a las cabezas visibles del partido, como Edmundo Bal, Begoña Villacís o Francisco Igea.

EN ENERO SOLO SE VOTA LA ORGÁNICA

Ciudadanos celebrará en enero primarias y una asamblea para renovar su liderazgo, pero la votación se limitará a la dirección orgánica, según las fuentes. "Inés no va a esas primarias porque va a quedar como referente de la parte política y con la idea de que sea la candidata a las elecciones generales" de 2023, han indicado.

De cambiar su estructura, Ciudadanos dejaría de tener presidencia y se le daría otro nombre a los cargos que asuman las direcciones orgánica y política, que estarían integradas en la ejecutiva. "La nueva dirección sería colegiada", han detallado al respecto.

No obstante, para elegir ambas direcciones "siempre habrá primarias", han explicado las mismas, que han subrayado que la intención de Arrimadas es ser la cabeza de lista en las generales.

Según las fuentes, en el proceso de escucha con las bases hay "unanimidad" en desligar a Arrimadas de la parte orgánica para que no se desgaste. En todo caso, la dirección política saldría de una votación, aunque posterior a la prevista para el mes de enero.

LA ESENCIA LIBERAL

En este contexto, el portavoz de la refundación del partido, Guillermo Díaz, ha asegurado hoy en una rueda de prensa en la sede nacional que otra demanda principal del proceso de escucha es una mayor delegación con los territorios en la toma de decisiones.

Para abordar esas demandas, Díaz ha dicho que se realizarán dos ponencias, una de valores y otra de estatutos. Ha dicho que Ciudadanos seguirá teniendo una ideología liberal, un espacio que "existe", por lo que no hay que hacer cambios "en las esencias".

Sobre los valores a defender, ha anunciado que este domingo organizarán un acto para poner "pie en pared" contra la cultura de la cancelación, "un eufemismo de la censura y la prohibición".

Llamado 'Prohibido prohibir', el acto estará destinado a defender la "libertad" en el arte, la ciencia y espacios públicos como la universidad para que desde izquierda y derecha, a través del Estado o de asociaciones o colectivos, no se intente "dictar la moral".

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