TOLEDO, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Cultura, Soledad Herrero, mostró hoy su apoyo a todos los religiosos de Toledo, porque "desde el Gobierno regional queremos estar muy próximos" a todos ellos a través del Plan para la recuperación de conventos vigente desde 1987, en el marco del cual animó a que los 14 conventos de la ciudad "saquen a la luz todos los tesoros que tienen" para que todos los toledanos los conozcan.
La consejera hizo estas declaraciones durante la inauguración de la exposición 'Dominicas' en el convento Santo Domingo El Real, para conmemorar el octavo centenario de la fundación del primer convento femenino de la Orden de Predicadores por el propio Santo Domingo, y que se podrá visitar desde el 4 de diciembre al 8 de marzo de forma gratuita.
También asistió a la inauguración el alcalde de Toledo, Emiliano García-Page; la profesora de Historia del Arte de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) y comisaria de la exposición junto con la Empresa Pública Don Quijote 2005, Palma Martínez-Burgos; así como la madre priora del Convento Santo Domingo el Real, María Teresa Fernández y el obispo auxiliar de Toledo, Carmelo Borobia.
Herrero explicó que la exposición ha sido posible "por la generosidad de las madres Dominicas, que celebran su octavo centenario" y que durante siglos han mantenido "con responsabilidad y devoción un tesoro que ahora quieren que todos disfruten de él, porque para eso está el Patrimonio".
En este sentido, afirmó que "son grandes señoras con una vida espiritual muy importante, y que están conservando un legado patrimonial importantísimo para todos los ciudadanos", que se ha abierto hoy al público.
ESPLENDOR PATRIMONIAL.
Por su parte, el alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, aseguró que "estamos viviendo el mejor momento patrimonial de la historia de Toledo", refiriéndose al "riguroso" tratamiento de recuperación por parte de las administraciones públicas "como no lo han hecho nunca", apuntó.
Asimismo, indicó que "Toledo está entre las ciudades más potentes del mundo, en términos culturales y patrimoniales", porque cada exposición que se hace "nos lleva a reconocer una ciudad de enorme profundidad cultural, donde ha tenido mucho que ver la Iglesia Católica, que atesora grandes reliquias, como las expuestas aquí".
En la misma línea, señaló que la capital regional ha mejorado "con barbaridad" tanto en el ámbito medioambiental como cultural, "porque estamos siendo especialmente rigurosos a la hora de conservar y poner en valor nuestro patrimonio, algo que es necesario e inteligente para Toledo, porque nuestro patrimonio reafirma nuestra identidad y profundidad como ciudad", subrayó.
Por este propósito y porque el patrimonio "es un valor económico y social de primer orden, que permite, en buena medida que la ciudad viva de ello", invitó a todos los toledanos a que visiten esta exposición y a que "reafirmen sus señas de identidad y sientan el legítimo orgullo de lo que somos y donde vivimos".
Finalmente rogó a las madres que recen con mucha devoción "especialmente al Cristo de las Aguas, porque según cuenta la leyenda, es el que trae el agua del Tajo, aunque seguramente no le consultaron sobre el trasvase, pero será bueno que le recéis para que nos ayude en la obra de la recuperación".
EXPOSICIÓN.
Por último, la madre priora indicó que, ante el octavo centenario de su congregación decidieron "que la mejor forma de honrar a Santo Domingo, sería a través de una exposición", de modo que perturbaron su paz conventual. "Hemos trabajado mucho, pero ha merecido la pena".
No obstante, la comisaria de la exposición explicó durante su intervención las diferentes reliquias expuestas, diferenciando el contenido en sí de la muestra, que consta de 83 piezas de pintura, escultura, orfebrería o grabados, entre otras técnicas artísticas, y el lugar de exposición, que es el mismo convento de Santo Domingo El Real caracterizado por "el impresionante valor monumental del Coro y del Palacio", ambos de estilo mudéjar.
Según explicó Martínez-Burgos, los dos espacios están vinculados con figuras femeninas de fuerte personalidad, que perpetuaron su memoria a través de las armas nobiliarias que presiden algunas estancias. De este modo, el Palacio formaba parte de aquellos otros palacios cedidos por Catalina de Lancaster en el siglo XIV, mientras que el Coro fue labrado por Doña Catalina de Castilla en el siglo XV y reformado a instancias de la priora Ana Duque en el Siglo XVI.
La exposición se ha organizado para dar a conocer la colección artística de la orden, para lo que se han unido los tres grandes monasterios de Madres dominicas que hubo en Toledo, el de Santo Domingo el Real, el de Jesús y María y el recientemente desaparecido Madre de Dios, cuyos bienes se conservan depositados en los dos primeros.