Avisa de 'nuevas' formas de delincuencia "salvaje" que entran "por Gerona" mientras "Rubalcaba otea las playas africanas"
MADRID, 30 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente del PP, Mariano Rajoy, ofreció esta tarde la colaboración de su partido al jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, en materia de inmigración por entender que la situación es "insostenible" y que el Gobierno está "objetivamente desbordado". Además, exigió que se adopte un programa de medidas urgente contra las nuevas formas de delincuencia a fin de que no arraiguen en España.
En su discurso en el Debate del estado de la Nación, el líder de la oposición reprochó a Zapatero la "satisfacción" con la que había hecho balance de su gestión en el Congreso de los Diputados, pese a que una mayoría de españoles, "incluida la clase política, piensa que desde 1977 no ha habido gobierno menos preparado y más ufano de su ineficiencia".
En lo que a la inmigración ilegal concierne, criticó la tardanza en pedir cooperación a la Unión Europea para poner "parches donde menos falta hace". "Por cada inmigrante que se juega la vida en un cayuco, entran cien por el Pirineo. El año pasado llegaron unos 7.000 inmigrantes a las costas canarias y entraron 700.000 por la frontera francesa. Con una diferencia: por el sur, nos llegan víctimas de las mafias, pero por el norte, mezclados con la gente que viene a resolver su vida, se nos cuelan placidamente las mafias y delincuentes. Conviene no confundir tareas", determinó.
ACORDARSE DE GOTERAS CUANDO HAY INUNDACIÓN
Tras recomendar a Zapatero que vaya a Canarias a comprobar en primera persona la situación --"yo lo haré", adelantó--, aseveró que hay que combatir la inmigración ilegal "en su conjunto", esto es, "la que llega a Canarias sin que nadie se lo impida, la que llega a Barajas y la que desborda cada mañana todas las fronteras de Gerona".
Rajoy afirmó además que el plan de regularización masiva que puso en marcha el Ejecutivo socialista ha dado lugar a un "efecto llamada ecuménico" con "una entrada de inmigrantes anárquica, incontrolada e insostenible". "Mejor será que abordemos este drama en serio y con eficacia. Necesitamos a los inmigrantes pero es preciso que lleguen de manera ordenada y legal. Esta situación es insostenible y cuanto más se tarde en actuar, más costoso resultará para todos. Nosotros estamos dispuestos a prestar toda nuestra colaboración, pero ha de mejorar la manera de hacer las cosas", enfatizó.
"Me he entretenido en este apartado porque la historia de este fracaso me parece el mejor ejemplo de cómo actúa este Gobierno y que se resume en cuatro rasgos. Primero: no se acuerda de las goteras hasta que se inunda la casa. Segundo: alborota mucho con sus grandiosas disposiciones huecas, sus planes especiales, sus viajes, sus fotos, sus comisiones de expertos y sus presupuestos extraordinarios, pero no aplica más parches. Tercero: se echa la siesta, es decir, abandona el problema porque tiene que atender otras cosas, tales como enredar con la Constitución o perseguir al PP. Cuarto: Al final deja todo mucho peor de lo que estaba. Cada vez que el Gobierno tiene una inspiración, se repite esta secuencia", sentenció.
DELINCUENCIA "IMPORTADA Y SALVAJE"
A continuación, centró su discurso en la inseguridad ciudadana y en esas nuevas formas de delincuencia "importada y salvaje" como los secuestros express, los asaltos de domicilio o los ajustes de cuentas entre bandas que, según dijo, los españoles no "conocían" antes.
"Por Barajas nos entran mafias de la droga y por el Pirineo los delincuentes más agresivos que hemos conocido jamás. Algunos delincuentes que proceden de lo que fue la Europa del Este, llegan encuadrados en sus antiguas unidades militares con su oficial a la cabeza y actúan con armas y estrategias castrenses que aplican al asalto de domicilios y empresas --resaltó--. Pues todos ellos entran sin dificultad por las fronteras de Gerona mientras Rubalcaba otea las playas africanas".
Para Rajoy, se ha dejado crecer "insensatamente" el problema y urgió a Zapatero a presentar un "programa de acción convincente", dado que hasta ahora "no se ha tomado ni una sola medida eficaz para atajarlo". "En cualquier caso, le exijo que no arraiguen en España los secuestros express, las bandas callejeras y los asaltos a domicilio y que tomen medidas para ello", apuntó. ECONOMÍA: EVITAR LA "TORMENTA PERFECTA"
Rajoy aprovechó su discurso para referirse también a la coyuntura económica: En este área, dijo que "no todo" está mal y que va "bien, incluso muy bien" lo que se refiere al crecimiento económico, la creación de empelo, el equilibrio de cuentas públicas o el superávit de la seguridad social.
"Pero la moneda tiene dos caras --avisó--. La economía española inició hace diez años un ciclo de crecimiento sostenido y estable cuya inercia aún nos dura. Debemos todos felicitarnos por ello, pero corresponde principalmente al Gobierno conseguir que no se frene. El déficit del sector exterior, las pérdidas de competitividad y el crecimiento de los precios hacen cada vez más difícil la continuidad del actual modelo de crecimiento".
En este contexto, recordó que fue el actual Comisario de Economía, el socialista Joaquín Almunia, que habló de un futuro "cargado de nubarrones" y recalcó que se está dando la "paradoja" de que hay crecimiento económico, pero no llega a las familias. "Ocurre que nuestra economía crece por encima del 3 por ciento al año, pero como la población está aumentando, como consecuencia de la inmigración por encima del 2 por ciento, toca menos a la hora de repartir y la renta per cápita crece con más parsimonia", apostilló.
Así, advirtió de que los socialistas tendrán que explicar por qué "no se contienen los precios"; por qué se "pierde competitividad"; por qué "algunas empresas cierran y se trasladan a otros países"; por que se ha perdido "atractivo" para atraer inversiones extranjeras o se ha desacelerado el acercamiento a las rentas medias europeas. "Debieran explicarlo y, sobre todo, debiera explicar qué piensa hacer para corregirlo", remachó.
"Tenemos por delante retos y desafíos importantes --señaló--. Podemos afrontarlos con éxito. Los españoles ya lo hemos demostrado. Es necesario que el Gobierno del señor Rodríguez Zapatero abandone la pasividad y la política de parches. En caso contrario, los nubarrones que nos anuncian desde Bruselas se pueden convertir en la 'tormenta perfecta'".
EDUCACIÓN Y VIVIENDA
También aludió Rajoy a la Educación y a la nueva Ley Orgánica de Educación (LOE), que tuvo "menos consenso" que la anterior, sacó "a la calle a millones de personas" y terminaran con el cese de la ministra del ramo. Bajo su punto de vista, si se busca una educación de calidad habrá que poner "más empeño" en fomentar la cultura del esfuerzo, en recuperar la disciplina en las aulas y apoyar al profesorado y las instituciones educativas. Demandó una nueva reforma legislativa al respecto.
En lo que toca a la vivienda, ironizó sobre la "gran trompetería" que utilizaron los socialistas para hacer hincapié en los "insoportables" precios de los pisos y la "escandalosa" especulación del ladrillo. El líder de la oposición le echó en cara al presidente que el Ayuntamiento de Madrid firma más contratos de alquiler de pisos que el ministerio y le culpó de usar esta materia para "proporcionar algún que otro titular tragicómico".
