MADRID 30 May. (EUROPA PRESS) -
Miembros del Gobierno y del PSOE coincidieron esta tarde, tras el 'duelo parlamentario' entre el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, y el del PP, Mariano Rajoy, en que este último está "sin Norte". En concreto, el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, le atribuyó asimismo un "berrinche de mal perdedor exigiendo cambiar las reglas del juego".
En declaraciones en los pasillos del Congreso, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega aseguró que Zapatero estuvo "magnífico" y que fue "un reflejo de lo que es la realidad de España". El titular de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, dijo que Rajoy estuvo "sin argumentos y sin propuestas", mientras que Zapatero lo hizo "muy bien".
En tono similar, el ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, vio a Rajoy en una "posición desnortada", sin "una sola propuesta" ni intentar "conectar con la felicidad de los españoles". "Frente a la España a todo color, que es la de la realidad, presenta la de sólo en negro", dijo.
NO LE HA BASTADO.
López Aguilar también sostuvo que Rajoy es incapaz de entender y estar en la oposición y le criticó por haber reclamado un debate monográfico con Zapatero "como si éste no le hubiera bastado" y cuando, además, no debatió en la campaña electoral de 2004 con el ahora presidente del Gobierno.
De su parte, Blanco aseguró que el líder del principal partido de la oposición "quiso ganar con un berrinche el debate que ha perdido". Para el 'número dos' en el organigrama del PSOE, hoy era la "última oportunidad" de Rajoy y la ha "perdido" con el "peor debate" que ha hecho "en los últimos tiempos". "He visto a un líder de la oposición sin Norte y sin horizonte, sin hacer propuestas", declaró.
"Quien va a pedir su cambio no voy a ser yo, serán los suyos --bromeó en conversación informal con periodistas--. Quiero unificarles a todos porque nos va muy bien con él y le ha salido horroroso".
Por último, el presidente de Aragón, el socialista Marcelino Iglesias, que asistió al 'rifirrafe' desde la tribuna, criticó que Rajoy siga "erre que erre" con "la vieja política del agua, superada en todo el mundo". "Ya cambiarán cuando vean que se produce más agua y de mejor calidad con la política de este Gobierno --finalizó--. Reincidir sobre el Ebro es malo y esos mensajes en Aragón caen muy mal".