BILBAO, 3 Dic. (EUROPA PRESS) -
Una persona detenida por participar en Bilbao en una manifestación no comunicada y enfrentarse a los agentes de la Ertzaintza, así como varias entidades bancarias y un concesionario quemados en Markina, Bilbao y Getxo es el balance de los últimos ataques de kale borroka registrados en Vizcaya.
Según informó el Departamento de Interior a Europa Press, los incidentes ocurridos en Markina sobre las nueve de la noche de ayer supusieron el ataque con 'cócteles molotov' a tres entidades bancarias de esta localidad, además del cruce de varios contenedores en la vía pública.
En torno a las diez y veinte de la noche, se produjo en Bilbao la detención de una persona por desórdenes públicos, amenazas e insultos. El arrestado practicaba en una manifestación no comunicada en la calle Ribera de la capital vizcaína.
Una media hora después, poco antes de las once de la noche, varios encapuchados rompieron las lunas de los escaparates de un concesionario de coches de la marca Peugeot, situado en la Avenida Lehendakari Agirre, también en Bilbao.
En la localidad de Getxo, el ataque se produjo a esta misma hora, antes de las once, cuando desconocidos dieron fuego a un cajero de una entidad bancaria en la calle Sarrikobaso. Las llamas fueron sofocadas por la Policía Municipal.
El último incidente del que informó la Ertzaintza fue el referido a la falsa alarma de amenaza de bomba en la discoteca Txitxarro de Itziar (Deba, Gipuzkoa), que desalojada durante media hora como medida de seguridad, sobre la una de la madrugada. La carretera N-634 también fue cortada durante algunos minutos por esta amenaza de bomba. La discoteca reabrió sus puertas con normalidad en torno a las tres de la madrugada.
Todos estos sucesos se vieron precedidos por el ataque protagonizado ayer por un grupo de encapuchados contra el batzoki ubicado en la calle Cuadrilla de Vitoria, que causó diversos daños materiales en su interior.
Aunque en el momento del ataque había varias clientes en el local, no se registraron daños personales. El suceso se produjo pasadas las dos y media de la tarde cuando un grupo de unos diez individuos con los rostros cubiertos se introdujo en la sede social del PNV y procedió a romper parte del mobiliario. Además, realizaron varias pintadas con pintura roja y amarilla.