Díez Usabiaga cree que las informaciones sobre cartas de extorsión a empresarios son una campaña de "guerra sucia" de PP

BILBAO, 27 Abr. (EUROPA PRESS) -

El secretario general de LAB, Rafa Díez Usabiaga, afirmó hoy que las informaciones aparecidas en las últimas semanas sobre nuevas remesas de cartas de extorsión a los empresarios se enmarcan en una campaña de "verdadera guerra sucia" propiciada por el PP y sectores afines, "que nada tiene que ver con la realidad". Además, señaló que la izquierda abertzale ha hecho "una apuesta muy clara por superar un escenario de violencias" y manifestó que ETA "actúa con responsabilidad".

En una entrevista concedida a ETB, recogida por Europa Press, Díez Usabiaga manifestó que "estamos ante una auténtica guerra sucia informativa, política, orquestada en este caso por el PP o lo que pueden ser 'morrois' (siervos) políticos del PP, como en este caso ha sido Ayesa, presidente de la patronal navarra".

A su juicio, "en este momento, la izquierda abertzale ha hecho una apuesta muy clara por un escenario de superación de violencias, donde se respete la voluntad de la ciudadanía vasca".

"Estamos abordando esta apuesta con total responsabilidad y es evidente que hay muchos enemigos de un nuevo contexto, hay muchos enemigos de la paz, a que Euskal Herria tenga un proceso de cambio político, pero, desde luego, ésos no están en absoluto en el marco de la izquierda abertzale, sino en el marco del PP y de otros sectores sociales y políticos que, en los últimos años, el aznarismo ha ido dejando en el ámbito de este país", apuntó.

A su juicio, "es un acto de guerra sucia política que nada tiene que ver con la realidad porque las decisiones que siempre ha adoptado ETA, en este caso el alto el fuego permanente, se han hecho con total responsabilidad".

BARAÑAIN Y GETXO

El líder de LAB dijo que los actos violentos de Barañain y Getxo "son incompatibles" para avanzar hacia la paz y las soluciones políticas, "lo mismo que todos los hechos que se vienen dando desde el alto el fuego, en clave de detenciones, de encarcelamientos, de prohibición de actos públicos de la izquierda abertzale, de no modificación de la política carcelaria, del desarrollo de los juicios políticos, como el del 18/98".

Por ello, señaló que "no se puede abordar con unilateralidad los actos de Barañain y Getxo", sino que todos deben trabajar "para la superación de todas las violencias y el respeto de la voluntad de la sociedad vasca". Además, consideró que el Gobierno del PSOE debe decir si está dispuesto a ello y mostró la disposición de la izquierda abertzale a hacerlo.