Reivindicará a los damnificados como ejemplo de "resistencia ante la barbarie"
VITORIA, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Diputación Foral de Álava homenajeará el sábado, con motivo del Día de la Memoria, a las "víctimas inocentes" y reivindicará su ejemplo de "resistencia ante la barbarie". El acto se celebrará frente al monumento de Agustín Ibarrola en memoria de los damnificados por el terrorismo, ubicado a la entrada de Vitoria.
Al igual que ocurrió en 2011, la conmemoración de esta fecha se ha visto rodeada por la polémica, dadas las diferencias entre los partidos respecto a si los homenajes han de incluir o no tanto a las víctimas del terrorismo como a quienes padecieron abusos policiales.
El PP y UPyD se oponen a incluir en las ceremonias organizadas con motivo de dicho día a los damnificados por vulneraciones de los derechos humanos cometidas por las fuerzas policiales, mientras que el resto de partidos vascos es partidario de tener en cuenta tanto a estas víctimas como a las del terrorismo.
La falta de entendimiento en relación a este asunto llevará a que varias instituciones vascas conmemoren por separado y con formatos diferentes esta jornada.
En el caso de la Diputación de Álava, el homenaje se realizará frente al monumento de Agustín Ibarrola en memoria a las víctimas del terrorismo, situado en la calle Portal de Foronda de Vitoria. En el acto estarán presentes las principales autoridades del territorio: el diputado general de Álava, Javier de Andrés; el alcalde de Vitoria, Javier Maroto; y el presidente de las Juntas Generales de Álava, Juan Antonio Zárate, todos ellos del PP.
"OLVIDO"
Durante el homenaje se leerá una declaración institucional de la Diputación de Álava. El texto, aprobado este jueves por el Consejo de Diputados, señala que "en un momento en el que se ha confirmado la derrota del terrorismo, gracias a los esfuerzos de toda una sociedad y a labor de las fuerzas de seguridad, de ninguna manera se puede dejar caer en el olvido a las personas cuya vida fue arrebatada en manos de la violencia irracional".
El Gobierno foral estima que el Día de la Memoria "debe servir para tener presentes a estas personas que fueron víctimas inocentes y cuyo ejemplo fue un espejo en el que mirarse para quienes
decidieron resistir a la barbarie".
"Su actitud fue imprescindible para hacer frente a quienes querían destruir la convivencia desde posturas totalitarias. Sin ellos, nuestra historia hoy sería distinta y no sería posible celebrar la victoria de la democracia sobre el fanatismo", continúa la declaración.
"LECCIONES"
La Diputación Foral considera que "la derrota del terrorismo alcanzará todo su significado cuando las lecciones que han ofrecido las víctimas y sus allegados sean reconocidas como una aportación vital a la sociedad vasca, no sólo en el presente y el pasado, sino también en el futuro".
Por ese motivo, afirma que esta jornada "no debe ser un momento aislado", sino que ha de "prolongarse en el tiempo y convertirse en una realidad de nuestro día a día". "El testimonio de cientos de ciudadanos que se sacrificaron en aras de la convivencia no
debe ser olvidado. La historia del País Vasco sólo puede escribirse haciendo justicia a estas personas", se subraya en el documento.
El gabinete presidido por Javier de Andrés manifiesta que "hoy es más indispensable que nunca un compromiso serio y riguroso, que permita a las próximas generaciones conocer la verdad de lo que sucedió en el País Vasco durante los años más oscuros de nuestra historia reciente".
Además, avisa de que "la garantía de que la barbarie no vuelva a repetirse radica en que el recuerdo de los desaparecidos y su ejemplo moral sigan siendo una luz que ilumine nuestros pasos". De esa forma, destaca que "la memoria de las víctimas es la que nos debe confirmar día a día que la democracia ha vencido".
