VALENCIA, 17 May. (EUROPA PRESS) -
Los diputados del PP se levantaron esta tarde de sus escaños con los brazos en alto y grabadoras en la mano cuando los dos diputados del PSPV firmantes de la denuncia por presuntas comisiones ilegales en Terra Mítica se disponían a formular sus preguntas al Consell en la sesión de control del pleno de las Corts Valencianes. Los parlamentarios del PSPV respondieron a la acción protagonizada desde los bancos del grupo popular primero con expresiones de protesta y después exhibiendo carteras.
La bronca entre los parlamentarios se inició cuando el portavoz adjunto socialista Antoni Such iba a formularle al conseller de Relaciones Institucionales y Comunicación, Esteban González Pons, una pregunta sobre el cumplimiento de la ley de Publicidad Institucional. En ese momento, los diputados del PP se levantaron de sus escaños y, con los brazos en alto, exhibieron grabadoras.
El presidente de la Cámara, Julio de España, pidió primero a los parlamentarios que se sentaran y, tras asegurarles que todo el contenido del pleno, "incluidas las declaraciones de cada uno de los diputados", son registradas por la Cámara, les llamó al orden por primera vez.
Después de que los populares volvieran a sentarse en sus escaños, Such retomó la palabra para asegurar que "por muchos numeritos que haga el PP, no van a hacernos callar", entre aplausos de los escaños del PSPV. De España también advirtió por primera vez al vicepresidente segundo de la Mesa, el socialista Joaquim Puig, después de haber oído "mencionar embutidos".
El conseller de Relaciones Institucionales, Esteban González Pons, defendió en su turno que no se asistía a un "numerito", sino a "la respuesta silenciosa y digna de un grupo parlamentario a una actitud indigna de un miembro de esta Cámara que responderá, como sabemos, desde esta mañana ante los tribunales". Sus afirmaciones vinieron acompañadas de aplausos desde los escaños del PP, mientras el presidente de la Cámara trataba de decirle que se atuviera al tema de la pregunta. González Pons finalizó su primera intervención diciendo que la Comunitat Valenciana "no se merece una oposición que graba las conversaciones y luego las difunde".
Una vez en el uso de la palabra el diputado del PSPV, De España amenazó también con suspender el pleno si continuaban "tirándose piedras" los unos a los otros. Such, que a su vez amenazó con un plante en el pleno si el presidente de la Cámara no le dejaba contestar a las alusiones, le respondió a González Pons que lo que sería "digno" por parte del Consell sería estar preocupado por "los 17.000 millones que faltan en Terra Mítica".
El conseller le replicó que no está dispuesto a "adentrarse en el debate sobre dónde está un dinero que probablemente sólo falta" en la "imaginación" del parlamentario socialista, y que, por eso, "lo busca incluso donde no debe", pero sí en el de la "dignidad" de los políticos, y aseguró que "hay cosas que no podemos hacer por dignidad". "Si faltase dinero sería muy grave y con eso se ofendería al cargo que se estuviera ocupando", pero "no falta", y agregó que "ahí está la auditoría judicial para demostrar".
González Pons censuró que se pueda "grabar una conversación con una persona que se encuentra imputada y darla a conocer a los medios de comunicación meses después eligiendo el día" o incluso "aceptar" en esa conversación que "se plantee la posibilidad de comprar por dinero la imputación de un cargo público incluso negociando el fin de esa persona presuntamente implicada en un hecho delictivo en un procedimiento judicial", dijo. "A mí no me graben las conversaciones privadas que podamos tener, porque yo sí creo que no grabar conversaciones está relacionado con la dignidad del cargo que se ostenta", agregó.
Además, el conseller le indicó a Such que "hacer publicidad institucional es algo más que hacer publicidad indirecta de la Tienda del Espía", y le espetó que "la ignorancia que demuestra sobre el tema pone de manifiesto sus actitudes como investigador privado 2.
CARTERAS
La exhibición de grabadoras por parte de los diputados del PP se volvió a repetir cuando le tocó a Camarasa formular una pregunta sobre las gestiones del Consell ante el ayuntamiento de Valencia para evitar la destrucción de las fosas comunes del Cementerio General de la capital en las que fueron enterradas víctimas del franquismo. La protesta desde los escaños del PP fue en esta ocasión contestada por los parlamentarios del PSPV, que fueron sacando progresivamente carteras e incluso un diputado mostró billetes de 20 euros.
En ese momento se produjo un cruce de acusaciones entre Such y el parlamentario del PP Manuel Gómez, después de que el primero escuchara cómo se le decía "habéis pagado un millón y medio". "Si eres valiente, nos vemos en el juzgado", contestó el diputado socialista.
La pregunta no pudo ser contestada por el Consell, pero Camarasa llegó a formularla debido, según señaló después el presidente de la Cámara a un error propio, ya que el conseller de Cultura y Educación, Alejandro Font de Mora, había presentado un escrito excusando su ausencia en el pleno. El portavoz adjunto del PP Rafael Maluenda pidió la palabra para advertir al presidente de la Cámara de que la pregunta no iba a poder ser contestada, mientras que la portavoz adjunta socialista Isabel Escudero reclamaba que contestara cualquiera de los seis consellers presentes en el debate.
Camarasa también intervino para lamentar que no existiera, dijo, en la Cámara "ni un solo conseller" que tuviera la "gallardía" y la "sensibilidad" de responder a una cuestión que "preocupa y ocupa a decenas de miles de valencianos".
