Don Juan Carlos elogia la "trascendente" labor de los fiscales para mantener "la igualdad y el pluralismo político"

MADRID, 11 Ene. (EUROPA PRESS) -

El Rey elogió hoy la "trascendente" labor desempeñada por los fiscales, que constituyen una "pieza fundamental del Estado en el mantenimiento de los valores superiores de nuestro ordenamiento constitucional: la libertad, la justicia, la igualdad y el pluralismo político". Don Juan Carlos pronunció estas palabras poco antes de inaugurar junto con la Reina la sede de la Fiscalía General del Estado tras su remodelación.

"Animo a todos los fiscales a perseverar en tan decisivas funciones para la seguridad jurídica y el bienestar social. Resulta incuestionable la trascendencia de tan altos cometidos para el Estado de Derecho", afirmó el Rey, que visitó junto con la Reina la remodelada sede de la Fiscalía General y presidió una sesión conjunta del Consejo Fiscal y de la Junta de Fiscales de Sala.

Los Reyes estuvieron acompañados por el fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, el ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, el presidente del Tribunal Supremo, Francisco José Hernando, y la presidenta del Tribunal Constitucional. Asimismo, al acto asistieron los ex fiscales generales del Estado, entre los que se encontraban Jesús Cardenal, Leopoldo Torres o Eligio Hernández.

Durante su discurso, Don Juan Carlos subrayó la "estrecha vinculación" que la Constitución establece entre la Corona y el Ministerio Fiscal, "pues a los fiscales corresponde promover la acción de la justicia que se administra en nombre del Rey". Afirmó que lo que define la identidad actual del fiscal es "la defensa de la legalidad y de los derechos de los ciudadanos".

"Es el defensor de la sociedad, de cada uno de sus integrantes y, especialmente, el valedor de las víctimas de cualquier delito. Le corresponde, además, velar por la independencia de los tribunales y procurar ante éstos la satisfacción del interés social", afirmó el Rey en su discurso.

Don Juan Carlos también se refirió a la remodelación de la sede de la Fiscalía General y consideró que el nuevo edificio es un "signo de modernización; simboliza la posición neurálgica del Ministerio Fiscal en el Estado de Derecho y permite al fiscal general del Estado ejercer apropiadamente sus altas responsabilidades".

En otro momento, agradeció a los fiscales su "eficaz y ejemplar entrega diaria" y su "voluntad de servicio a España y todos los españoles". Asimismo, se refirió a los miembros de la carrera fiscal como un "conjunto de profesionales altamente motivados" que son el "mejor instrumento" para poder hacer frente a las nuevas formas de criminalidad.

EL FISCAL, ELEMENTO CLAVE

Por su parte, el ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, también consideró al Ministerio Fiscal como un "elemento clave y pilar fundamental" para luchar contra las nuevas formas de delincuencia y en materias como la violencia de género, delincuencia económica, la protección del medio ambiente o la lucha contra la siniestralidad laboral.

El ministro apostó por dotar al Ministerio Fiscal de instrumentos que propicien un acercamiento de esta institución a la ciudadanía. "Para ello resultará necesario abordar una reforma del Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal de forma que se posibilite una redistribución orgánica más eficaz sin perjudicar en modo alguno el principio de unidad de actuación y dependencia jerárquica", señaló.

López Aguilar también consideró que la cercanía del fiscal al ciudadano requerirá igualmente un "incremento importante del número de fiscales en plantilla dentro de la carrera fiscal". Así, recordó que la voluntad del Gobierno es crear 1.000 nuevas plazas de jueces y fiscales en esta legislatura. En 2005 se han creado 136 plazas de fiscales para 2006 están previstas al menos 100 plazas más.

RENOVACIÓN DEL MINISTERIO FISCAL

Finalmente, el fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, aseguró que no hay constancia de que exista en el mundo "otro ordenamiento donde el fiscal esté presente, de manera activa, en unidad de actuación y con legitimación propia, como sucede en España, ante todas y cada una de las instancias encargadas de resolver conflictos".

A su juicio, la nueva perspectiva constitucional de la tarea del Ministerio Fiscal aporta aires de "renovación de la faz y el fondo" de los miembros de la carrera, "igual que los materiales empleados en la obra de remodelación de esta casa", la renovada sede de la Fiscalía General.

"Especialización, unidad de actuación y flexibilidad organizativa constituyen las coordenadas de un salto al futuro que más pronto que tarde terminará ubicando al fiscal en la posición crucial del nuevo proceso penal del siglo XXI que ya le corresponde en casi todos los países de nuestro entorno", señaló Conde-Pumpido.

Finalmente, el fiscal general, dirigiéndose al Rey, afirmó que sería una satisfacción que cuando reine su nieta Leonor ("aunque permitidme desear que la hagáis esperar mucho", agregó) y se repita una ocasión como ésta, "habrá un fiscal o una fiscal que sin duda volverá a hablar de desfallecimientos y desalientos, de ánimo y esperanzas" y deberá mencionar "los principios constitucionales" que encarnan los Reyes.