LOGROÑO, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Consejería de Turismo, Medio Ambiente y Política Territorial del Gobierno de La Rioja ha redactado la 'Guía para la elaboración del Informe de Sostenibilidad Ambiental de los Planes Generales Municipales en la Comunidad Autónoma de La Rioja' que pretende servir de orientación a los técnicos a la hora de redactar estos informes que deben acompañar obligatoriamente a los Planes Generales Municipales, según indicó hoy en la presentación de la misma la consejera de Política Territorial, Aránzazu Vallejo.
La Ley de Ordenación del Territorio y Urbanismo de La Rioja, LOTUR, recoge en su disposición adicional quinta que están obligados a someterse obligatoriamente al proceso de evaluación ambiental los siguientes instrumentos de ordenación del territorio y del planeamiento urbanístico, como son los planes Generales Municipales, tanto de nueva redacción como revisión; los planes parciales que incorporen al proceso de desarrollo urbanístico ámbitos de suelo urbanizable no delimitados; y los planes parciales y planes especiales de desarrollo del planeamiento general municipal cuando este último no haya sido objeto de evaluación ambiental
Los Ayuntamientos son los encargados de elaborar el documento del Plan General Municipal y el Informe de Sostenibilidad Ambiental. Una vez aprobados por el pleno municipal, se abre un proceso de consulta a las Administraciones públicas afectadas y al público. El siguiente paso es la redacción de la memoria ambiental. La aprobación definitiva del Plan General no se producirá por parte del pleno de la Comisión de Ordenación Territorial y Urbanismo hasta que la memoria ambiental haya obtenido el visto bueno de la Dirección General de Calidad Ambiental.
El Informe de Sostenibilidad debe identificar, describir y evaluar los probables efectos significativos sobre el medio ambiente que puedan derivarse del Plan General Municipal e incluir alternativas técnicamente razonables y ambientalmente viables.
El proceso de evaluación ambiental permite integrar el medio ambiente en el desarrollo urbanístico con el objetivo de garantizar un desarrollo sostenible más duradero y lograr un planeamiento urbanístico sostenible que debe tener en cuenta una serie de criterios generales.
Se trata de minimizar el consumo de suelo y racionalizar su uso de acuerdo con un modelo territorial globalmente eficiente; garantizar la preservación de los valores naturales considerando la capacidad de acogida del territorio a la hora de la asignación de usos; conservar la biodiversidad territorial; compatibilizar el planeamiento con el ciclo natural del agua; racionalizar el uso de agua.
También pretende minimizar el consumo energético de los sistemas urbanos, reduciendo su contribución al cambio climático; disminuir al máximo las emisiones de contaminantes a la atmósfera; plantear un nuevo concepto de movilidad que permita construir municipios más habitables y con menor huella ecológica; prevenir y corregir la contaminación acústica, lumínica y electromagnética; conferir protagonismo a la trama de parques públicos y zonas verdes como pieza clave del equilibrio socio-ambiental del municipio; fomentar la rehabilitación y recuperación de zonas urbanas degradadas tanto ambiental como socialmente; y evitar o reducir los riesgos naturales y tecnológicos.
