Carod asegura que hay "puertas abiertas" a pactos entre todos los partidos al margen de declaraciones públicas
BARCELONA, 17 Jul. (EUROPA PRESS) -
El presidente de ERC, Josep Lluís Carod-Rovira, anunció hoy que su partido pondrá sobre la mesa de negociación de posibles pactos postelectorales la aceptación de diferentes leyes y proyectos del tripartito como "punto cero" para alcanzar un acuerdo de Gobierno. Carod dio por hecho que el origen de estas iniciativas en el Pacto del Tinell no es impedimento para que CiU las avale y "no modifica el panorama de posibles alianzas" de futuro.
Según Carod, la primera condición de los republicanos para un acuerdo postelectoral es la aceptación de las bonanzas de media docena de iniciativas del Gobierno de la Generalitat impulsadas mientras ERC formaba parte del mismo y que se consideran de "interés general".
Las iniciativas que ERC considera irrenunciables para el próximo Gobierno de la Generalitat son el mantenimiento y desarrollo del Acuerdo Estratégico para la Competitividad y el plan para la internacionalización de las empresas catalanas, el Plan Nacional de la Educación, el plan estratético de turismo --ambos impulsados por ERC-- y el Plan de Infraestructuras y los planes directores territoriales.
Asimismo, se consideran "instrumentos cruciales" para la próxima legislatura la aprobación de las leyes de Servicios Sociales y de creación de la Oficina Antifraude, también lideradas por ERC desde el Gobierno y que no se pudieron aprobar esta legislatura, en el último caso por las reticencias manifiestas del PSC. Según Carod, todos estos proyectos cuentan con el beneplácito del sector y los que han pasado por el Parlament han sido refrendados también por CiU.
Carod insistió en que ERC se basará en los "contenidos y proyectos" a la hora de afrontar posibles pactos rehuyendo de criterios como "el nombre del candidato, el apellido, el origen o la lengua que use para hablar en casa con su esposa". Tampoco se valorarán "las etiquetas políticas preestablecidas" de partido nacionalista o de izquierdas.
Según Carod, el panorama de pactos postelectorales está "abierto" y, al margen de declaraciones y reproches a CiU por un hipotético interés en pactar con el PP, aseguró que "una cosa son las declaraciones públicas y otra diferente la existencia de puentes abiertos y puertas abiertas con todos los partidos".
"Todo el mundo habla con todo el mundo", dijo y añadió que "no existen sólo las declaraciones, también está lo que no se dice".
No obstante, Carod fue especialmente crítico con la federación nacionalista a quien acusó de verse "traicionada por el subconsciente" cuando aspiran a lograr 60 diputados --la mayoría absoluta en el Parlament se sitúa en 68 diputados-- con el único objetivo de "un pacto con el PP".
Según Carod, "si la opción de CiU fuera ERC o el PSC no aspiraría a lograr 60 escaños" y consideró que el pacto con los populares le saldría a CiU "más baratito" y le permitiría tener una "mayoría confortable para desarrollar las políticas conservadoras de siempre".
Por su parte, un pacto 'PSOEvergente' haría del Gobierno de la Generalitat un "gobierno al servicio permanente de Madrid" y perpetuaría la "Catalunya de peaje". Según Carod, Catalunya necesita una ERC "fuerte" para que el Gobierno catalán sea "firme" en las negociaciones con Madrid.
Sobre la campaña del candidato del PSC, José Montilla, Carod evitó comentar un "pre-eslogan de una 'pre-precampaña'" aunque apuntó que sería "lamentable que 'la hora de los catalanes' sea sólo ahora, cuando debió ser desde hace siglos".
CAROD EN EL GOBIERNO.
Carod reafirmó su voluntad de formar parte de un Gobierno catalán en el que ERC participe y señaló que "sería un fraude" al electorado republicano pensar lo contrario. El líder de ERC se comparó con un ciclista que participa en el Tour de Francia y que quiere llegar a París vestido con el maillot amarillo.
Sobre la negociación de los próximos presupuestos generales del Estado, Carod señaló que "quedan muy lejos" y centró el objetivo prioritario de ERC en la campaña para las elecciones del próximo 1 de noviembre. Carod también rompió una lanza en favor de Pasqual Maragall y pidió "respeto" a la figura del presidente de la Generalitat y a las decisiones que "legalmente sólo le corresponde tomar a él".
El líder de ERC señaló que quien quiera polemizar sobre la fecha demuestra una actitud "destructiva" y "propia de quien todo lo ve mal". Además, recordó que Jordi Pujol nunca hizo consultas a la hora de fijar la fecha de unos comicios.
