BARCELONA 13 Dic. (EUROPA PRESS) -
ERC aprovechará su turno en la sesión de control al presidente de la Generalitat, José Montilla, del próximo día 21 para apremiarle a poner en marcha las iniciativas pertinentes para el despliegue del Estatut, según anunció hoy el portavoz parlamentario, Joan Ridao, quien aprovechó para recordar que ERC tiene las "manos libres" en Madrid para negociar con el Gobierno central sobre la materia.
Ridao recordó en rueda de prensa en el Parlament que la constitución de las tres comisiones bilaterales que fija el Estatut "no se puede demorar más" y auguró "dificultades" en el despliegue de las previsiones estatutarias, más aún cuando se requieren modificaciones en una veintena de leyes y hay sobre la mesa traspasos "delicados", y modificaciones en el sistema de financición.
Según Ridao, ERC tiene intención de "priorizar el consenso y la unidad de acción de los partidos catalanes", aunque señaló que en caso de no producirse actuará con "las manos libres" en sus negociaciones con el Ejecutivo central.
Los republicanos también aprovecharán el pleno para brindar al vicepresidente, Josep Lluís Carod-Rovira, la oportunidad de exponer las líneas maestras de la política lingüística del nuevo gobierno. En respuesta a una interpelación de ERC, Carod desglosará las políticas de incentivo y promoción del uso social del catalán y sus planes para hacer de la política lingúística una "política pública de carácter transversal".
El vicepresidente también podrá aprovechar, según Ridao, para atajar "falsedades" sobre la política lingüística en el sector del comercio o el "falso debate" del catalán en las escuelas.
Por su parte, CiU incidirá en buscar discrepancias entre los socios del Gobierno tripartito con una interpelación sobre el Cuarto Cinturón, el decreto sobre la tercera hora de castellano o los robos registrados en Catalunya en los últimos días.
El portavoz parlamentario de CiU, Felip Puig, sostuvo que la "innacción del Gobierno catalán provoca un aumento de la sensación de inseguridad" y alertó de que "la política se seguridad está en crisis".
Según Puig, la conselleria de Interior "ha pasado de ser un escaparate para la proyección personal" de Montserra Tura a un "departamento estanco desaparecido". Desde el PSC, la portavoz parlamentaria adjunta, Carme Figueras, recomendó a CiU que "cambie el guión" y se pase a la "oposición constructiva".