LISBOA 19 Oct. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Patricia Ferro) -
La próxima cumbre bilateral entre España y Portugal, que se celebrará los días 24 y 25 de noviembre en Badajoz, tiene como objetivo, además de los temas bilaterales, dar una proyección exterior de los dos países ibéricos y unir esfuerzos para afrontar juntos los grandes problemas del siglo XXI, anunciaron hoy en Lisboa los ministros de Exteriores de España y Portugal, Miguel Angel Moratinos y Luis Amada, respectivamente.
Ambos políticos recordaron el excelente momento por el que pasan las relaciones bilaterales entre los dos países y destacaron la necesidad de que esa cooperación se extendían al ámbito europeo e internacional compartiendo una postura y una voz al unísono para afrontar los problemas de paz, seguridad y estabilidad en el mundo. La primera gran oportunidad para ello será en el segundo semestre de 2007, durante la presidencia europea de Portugal.
Moratinos consideró que los dos gobiernos quieren reforzar la cooperación bilateral, pero ya "en una perspectiva lógicamente europea e internacional".
En ese sentido, el jefe de la Diplomacia dijo: "vamos a trabajar de manera muy concertada para acompañar y ayudar a la presidencia portuguesa a mantener su agenda y su compromiso de dar un impulso decisivo a la construcción europea y al mismo tiempo escoger e impulsar aquellas áreas de interés prioritario para los dos países".
"Estamos seguros de que todos los esfuerzos van a converger para que durante la presidencia portuguesa de la UE todos los asuntos de mayor relevancia para España y Portugal, ya sea Iberoamérica, Mediterráneo, o África, tenga mayor impulso y desarrollo", afirmó el ministro español.
La Cumbre hispano-lusa que se celebrará los próximos 24 y 25 de noviembre en la ciudad extremeña de Badajoz, será un buen marco para "demostrar el excelente nivel de relaciones y ese compromiso entre los dos pueblos, las dos sociedades y también los dos gobiernos de trabajar conjuntamente para crear más Europa, y una Europa donde los intereses portugueses y españoles queden mejor defendidos", señaló Moratinos.
Al igual que en la cumbre precedente, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el primer ministro luso, José Sócrates, encabezarán ambas delegaciones en Badajoz, en donde estarán presente los dos gabinetes de gobierno casi en su totalidad, avanzó hoy el ministro de Exteriores.
El objetivo es darle a Badajoz el impulso que se alcanzó en la de Evora y que permitió trasladar la voluntad de los dos países de colocarse al mayor nivel de innovación, desarrollo e investigación como fue la propuesta del Centro de Braga, además de los temas bilaterales como la cooperación transfronteriza, los transportes o la energía.
También estará sobre la mesa la estabilidad de la zona del Mediterráneo y el tema de la inmigración "uno de los principales del siglo XXI", consideró Moratinos que de nuevo agradeció la "fuerte colaboración y apoyo que siempre hemos obtenido de Portugal", en esta materia, sobre la que "habrá que trabajar y discutir conjuntamente".
El ministro español recordó que la Cumbre Iberoamericana que en noviembre se celebra en Uruguay el principal objetivo es "migración y desarrollo". Sobre ese asunto, "España y Portugal tienen la misma sensibilidad y la misma voluntad de defender los flujos migratorios legales y combatir los que sean ilegales", apuntó. Además, señaló, "consideramos que para combatir la inmigración es necesario abordar los problemas de pobreza que sufren la mayoría de los países africanos". En ese sentido, Moratinos recordó que España aprovechará la "experiencia que tiene Portugal con los países africanos" para trabajar conjuntamente en muchos países.
Moratinos viajó a Lisboa acompañado por el secretario de Estado para Asuntos Europeos, Alberto Navarro, y el director general de política exterior del Ministerio, Rafael Dezcallar, que se reunieron con sus respectivos homólogos portugueses.
Los dos jefes de la Diplomacia ibérica se reunieron a mediodía y durante una hora en el Palacio de las Necesidades, sede del Ministerio de Exteriores portugués. Después el ministro español se reunió con el presidente de la República, Aníbal Cavaco Silva.