Estatut.-CiU pide a ERC que deje el Gobierno si rechaza el texto, pero CiU "no será muleta" del tripartito

Actualizado: jueves, 26 enero 2006 15:56

Lamenta la "capitulación en toda regla de Piqué dentro del PP"

BARCELONA, 26 Ene. (EUROPA PRESS) -

El portavoz de CiU en el Parlament, Felip Puig, afirmó hoy que "si ERC no está de acuerdo con el pacto político del Estatut, sus consellers deben abandonar el Gobierno de la Generalitat" por "respeto a la dignidad institucional", pero aseguró que, si ocurre así, los convergentes "no harán de muleta" del tripartito.

Puig añadió que, si Esquerra sale del Ejecutivo, CiU "tendrá consideración de cara al acto de contrición que seguramente tendrá que hacer Maragall" por haber hecho "un pacto contra natura" para desbancar a Convergència, según él.

Según él, aunque queden "bastantes meses" para votar la consulta popular, "no se puede llegar a un referéndum con un Gobierno, que se forma y legitima en el Parlament para conseguir un Estatut, sin la necesaria cohesión". "Quién defenderá la campaña para una referéndum? ¿El conseller Bargalló?", se preguntó.

Después de que ERC anunciara su 'no' al pacto PSOE-CiU pero su continuidad en el Ejecutivo, Puig no tiene "ningún miedo de que ERC esté en estos momentos en condiciones de arrastrar a una sola parte de la centralidad del país", porque "desde un punto de vista de contenidos y actitudinal, se ha situado en un extremo muy radical y marginal de la política catalana". En este sentido, consideró el pacto económico del Estatut "muy positivo en relación a lo que había hasta ahora".

El portavoz convergente criticó a Esquerra por su "reacción infantil de pataleta" y "visceral" ante el pacto que cerró CiU, porque "las manifestaciones de celos no llevan a ninguna parte", y consideró que esta actitud lleva a una "situación insostenible" del Ejecutivo, que "no se ha entendido en nada" y "sólo se justificaba por un objetivo: conseguir el Estatut". Les pidió "que no entorpezcan un Estatut positivo".

El dirigente de CiU cree que las acusaciones de protagonismo de la federación "retornan a ERC como un boomerang letal" porque los republicanos decían la semana pasada que sólo quedaban algunos flecos, según Puig, quien se preguntó qué ha pasado para que ahora no vean el acuerdo, si no es que Esquerra se ve "fuera de juego".

También replicó el anuncio de ERC de apoyar sólo puntualmente al Gobierno en el Congreso. Puig se preguntó qué ha sacado hasta ahora Esquerra del Ejecutivo central. En cuanto a la posibilidad de que CiU aproveche ese hueco para acercarse más al PSOE, reiteró que la federación está "predispuesta" a acercarse al PSOE "si retoman una centralidad y una mayor sensatez en sus políticas y en sus alianzas, CiU estará dispuesta en el futuro".

En cualquier caso, constató que "obviamente esto pasa por que CiU, si gana las elecciones, vuelva a gobernar", que es el "primer objetivo" de la federación "aunque el PSOE perdiera algún aliado".

Sobre el pacto estatutario entre el presidente del Gobierno y el de CiU, esperó que "en los próximos días se irán concretando y manifestando los acuerdos politicos a través de los documentos y de los acuerdos que se irán sistematizando en la comisión mixta paritaria que en el Congreso se irá tramitando", ya que -admitió_ "no hubo un acuerdo firmado entre Zapatero y Mas, pero hubo un acuerdo que se plasma en documentos compartidos y modificados a lo largo de sus más de siete horas de reunión".

Puig también valoró la polémica por las declaraciones de líder popular catalán, Josep Piqué, la posterior desautorización del PP estatal y su reunión con su dirigente, Mariano Rajoy, tras la que no dimitió. "Yo haré aquéllo que mi partido vaya decidiendo, como es natural, y por tanto no tengo nada más que añadir", dijo hoy Piqué.

Felip Puig lamentó la situación porque "desde ahora, el PP campará, desde el punto de vista estratégico, más libremente", mientras que el PP catalán "apostó hace un tiempo por un intento de aprximación a la catalanidad". "Me sabe mal por Piqué", dijo, y constató que el PP "abandona su voluntad de ser partido con presencia real en la política catalana".

"Es una capitulación de Piqué en toda regla dentro del PP", dijo, aunque, sobre la polémica en general, añadió: "Me sabe mal por Piqué" porque "intentaba apaciguar la feroz estrategia y actitud de la estrategia del PP".