Estatut.- Mas cenó con un grupo de empresarios, que le instaron a pactar el Estatuto, días antes de verse con Zapatero

MADRID/BARCELONA 5 Mar. (EUROPA PRESS) - El presidente de Convergencia i Unió y secretario general de CDC, Artur Mas, mantuvo un encuentro privado con empresarios unos días antes de pactar con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que el Estatuto saldría adelante con el apoyo de CiU. En ese encuentro se abordaron las dificultades que planteaba la negociación del Estatuto y la mayoría de los empresarios pidieron a Mas que se cerrara un acuerdo lo antes posible. La reunión se produjo el día 17, cuatro días antes del encuentro secreto de Mas y Zapatero en La Moncloa en el que se cerró el pacto global del Estatut. Consistió en una cena en casa de uno de los emprasarios, Leopoldo Rodés, presidente de Media Planning. A esta cena acudieron, entre otros, el presidente de Repsol YPF, Antoni Brufau; el presidente de Agrolimen, Lluís Carulla; el editor de La Vanguardia y Consejero de la Caixa, Javier de Godó, y el presidente del grupo Planeta, José Manuel Lara. También asistió el presidente de Freixenet, Josep Lluís Bonet. Durante el encuentro analizaron la situación en que se encontraba la negociación del Estatuto de Cataluña. En aquel momento había superado ya el debate en el Pleno del Parlamento y había sido tomado en consideración el texto para iniciar la tramitación en el Congreso, aunque no había comenzado a reunirse aún la ponencia. Sin embargo, las posturas estaban muy distanciadas entre las enmiendas que había planteado el PSOE y la defensa del texto aprobado en el Parlamento catalán por parte de ERC y CiU. De hecho, en aquellos días podía dar la impresión de que era más dificil llegar a un acuerdo con los convergentes que con los republicanos. Alguno de los empresarios, como José Manuel Lara, se mostraron muy críticos con el Estatuto, durante la cena con Artur Mas, según las fuentes consultadas, quienes apuntaron que el Conde de Godó fue más moderado en sus posiciones. En cualquier caso, la mayoría de los empresarios allí reunidos plantearon a Mas la necesidad de alcanzar cuanto antes un acuerdo en torno al Estatuto catalán. Esa misma semana, la del 16 al 22 de febrero, estaba previsto que Zapatero y Artur Mas se vieran para tratar de sacar adelante el proyecto. En un princiopio se planteó la reunión para el jueves o el viernes de esa semana. Sin embargo, las fuentes consultadas apuntaron que Mas quería esperar a que se produjera la reunión del Comité Federal del PSOE, que se celebró el 21 de enero. En la situación en la que estaban produciendose las negociaciones, prefería esperar a ver cuál iba a ser la reacción de los socialistas en el Comité Federal. Sin embargo, en ese encuentro, el PSOE dió mayoritariamente su respaldo a Zapatero, quien en su intervención se mostró convencido de que se alcanzaría un acuerdo, aunque no explicó en qué términos. Esa misma tarde, Zapatero y Mas se reunían en secreto en Moncloa, en un encuentro que duró cerca de seis horas y finalizó pasada la media noche. Allí sellaron el acuerdo de sacar adelante el Estatuto pactando la financiación en términos parecidos a lo que el Gobierno y el PSOE ya habían negociado con el Grupo Parlamentario de CiU en el Congreso. Dos semanas más tarde y con motivo de la visita de Zapatero a Barcelona, para acudir al Comité Federal del Partido Socialista de Cataluña (PSC), el jefe del Ejecutivo mantuvo otra comida, esta vez el anfitrión fue Fornesa, el presidente de la Caixa. A ella acudieron también algunos de los empresarios que habían estado en la cena con Artur Mas, como Rodés, Carulla o Godó. Además, acudieron, entre otros, el presidente de Gas Natural, Salvador Gabarró y el director general de la Caixa, Isidre Fainé.