MADRID 12 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente del PP de Cataluña, Josep Piqué, expresó hoy su convicción de que habrá un nuevo Estatut porque el coste de que no se reforme el texto "sería muy fuerte" y agregó que a su juicio sería un "disparate" que la aprobación del texto se produjese sin CiU y el PP, "sin el partido más votado en Catalunya y sin el concurso del principal partido de la oposición, aunque nunca se sabe, con el presidente del Gobierno que tenemos".
El resultado del proceso negociador, agregó Piqué, "será un Estatut distinto del que salió del Parlament". "El debate es ver cómo se salvan los muebles y se cubren las apariencias del cuatripartito", agregó en declaraciones al programa 'Protagonistas', de Punto Radio, recogidas por Europa Press.
Sobre la definición de Cataluña como nación en el Estatut, Josep Piqué explicó que, a su juicio, el debate sobre su inclusión en el preámbulo en el articulado "es una forma de encontrar salida a un problema artificial". "Son discusiones bizantinas que no tienen sentido, esto se resolvió bien en la constitución del 78, hemos funcionado bien distinguiendo entre nacionalidades y naciones y volver a este debate es absurdo", interpretó.
La apuesta del PP en este proceso, añadió Piqué, es defender enmiendas al texto, "que son una reforma sensata del estatuto vigente y no es mega constitución del Parlament de Cataluña, con un grado muy alto de frivolidad".
MARGINACIÓN DEL PP
El dirigente catalán fue preguntado también por la reunión que hoy y mañana celebra su partido en Toledo, días en los que analizarán la "absoluta opacidad y falta de transparencia del Gobierno, otra de las mentiras del presidente". "Conocemos lo que se gesta a través de filtraciones y bulos, pero no sabemos qué se está haciendo con nuestras instituciones".
Sobre las críticas de Alex Vidal-Quadras a la dirección del PP catalán, Josep Piqué contestó que "lo que suele generar alarma en Catalunya son las declaraciones de Vidal-Quadras", y pidió "lealtad" al crítico 'popular', "que no olvide que la dirección del PP en Cataluña recibió un aval de todo el partido, así que cuando hace esas críticas la extiende al conjunto de toda España".
Josep Piqué añadió que en el panorama actual "muchas veces" echa de menos a Jordi Pujol y "a veces", también a Felipe González. Al primero, porque "no podía llegar a imaginar" que un presidente no nacionalista como Pasqual Maragall "llegase a hacer lo que hace", y al segundo, porque "aunque cometió muchos errores, nunca perdió el sentido de Estado y la necesidad de defender la constitucionalidad de nuestras intuiciones y los consensos básicos y Zapatero sí está dispuesto a romper el espíritu de la transición".