Estatut.- PP dice que Ibarra ha demostrado que es un "hombre de partido" aunque ello suponga "traicionar" a Extremadura

Actualizado: lunes, 22 mayo 2006 15:47

Piden que los socialistas extremeños no apliquen la disciplina de partido ejercida en la votación del estatuto catalán con el andaluz

MÉRIDA, 22 May. (EUROPA PRESS) -

El Partido Popular considera que el presidente de la Junta extremeña, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, demostró el pasado jueves en su intervención ante el Pleno de la Asamblea que antepone los intereses de su partido a los de Extremadura, en referencia a las palabras en las que señalaba su disconformidad con el estatuto catalán, y que sin embargo hubiera votado a favor por respeto a la "disciplina de partido".

En la rueda de prensa posterior al Comité de Dirección del PP extremeño, la secretaria general del Grupo Parlamentario Popular, Cristina Teniente, dijo que después del discurso defendido en la Asamblea, el secretario regional del PSOE "ya no tiene que disimular" cuáles son sus intereses.

"Ibarra ha renunciado a defender los intereses de Extremadura para plegarse a los intereses de su partido", apostilló Teniente, en referencia a la intervención de Ibarra en un Pleno de la Asamblea de Extremadura en el que se produjo un debate sobre las posibles repercusiones que sobre Extremadura tendrá el nuevo Estatuto de Cataluña, si finalmente se aprueba su reforma.

Teniente se refirió a las palabras textuales de Ibarra en las que decía: "no estoy a favor de ese estatuto, pero hubiera votado sí por disciplina de partido". Apuntó igualmente la intervención en la que afirmaba: "Por mi partido, si tengo que tragarme el estatuto, me lo trago".

Añadió al respecto que la actuación en la Asamblea confirma que para Ibarra "todo vale" en defensa de su partido político, incluso si ello supone "traicionar" a los ciudadanos de Extremadura, que es lo que los populares consideran que ha hecho el presidente de la Junta después de que los diputados y senadores socialistas extremeños hayan votado favorablemente a un texto que es -en opinión de Teniente- perjudicial para la región.

ESTATUTO ANDALUZ

Por todo ello, los populares se preguntan ahora en cuantas ocasiones anteriores habrá actuado Ibarra contra los intereses de los extremeños para "salvar la cara" de su partido, y recordó en este sentido algunas de las decisiones en las que ha participado el Gobierno central socialista y que en su opinión perjudican a Extremadura, como las negociaciones de los presupuestos de la UE, las OCM del tabaco y el olivar, o la "paralización" de infraestructuras como el AVE o la Autovía de la Plata (A-66).

Asimismo, dijo que espera que la misma "disciplina de partido" adoptada por Ibarra en el caso del Estatuto de Cataluña no se vea trasladada a futuras cuestiones, como por ejemplo la reforma del texto de autonomía de Andalucía, fundamentalmente en lo que concierne a la pretensión de los socialistas que dirige Manuel Chaves de asumir la gestión de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, cuya cuenca afecta a caudales que transcurren por territorio extremeño.

"Si el estatuto andaluz nos perjudica en este aspecto, lo que tiene que hacer (Ibarra) es que sus diputados voten en contra de la admisión a trámite", porque de lo contrario "demostrará lo de siempre, que tenemos como presidente de la Junta, simplemente a un hombre de partido".

FERNÁNDEZ DE LA VEGA

Por otro lado, lamentó el espectáculo "bochornoso" protagonizado este fin de semana en la región por la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, quien según los populares "vino a burlarse de los extremeños y de Ibarra" al afirmar que el estatuto catalán es beneficioso para la región.

Finalmente, Teniente dijo que a pesar de que el presidente de la Junta se mostró el jueves disconforme con la reforma, la vicepresidenta del Gobierno "ya habrá convencido a Ibarra para que vaya a Cataluña a hacer campaña" a favor de la aprobación del nuevo estatuto, con lo que habrá una nueva oportunidad de obtener instantáneas como la tomada en las pasadas elecciones, en la que el secretario general extremeño se funde en un abrazo con Pasqual Maragall y juntos hacen el símbolo de la victoria con las manos.