MADRID 3 May. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del PSOE en el Congreso, Diego López Garrido, culpó hoy a ERC de no haber "querido hacer ver" a sus bases que todo estatuto de autonomía es un "pacto" y que, por tanto, el proyecto de reforma del Estatut catalán que aprobó el Parlamento autonómico luego tenía que pasar por las Cortes.
En declaraciones a la cadena Ser recogidas por Europa Press, López Garrido consideró que el texto, tal y como se está debatiendo en el Senado, "va a quedar así" y admitió que antes del pacto alcanzado entre el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el líder de CiU, Artur Mas, por el que se desbloqueó la negociación, el contenido de la reforma "era bien visto" por los dirigentes de ERC.
En este sentido, el portavoz parlamentario del PSOE explicó que era "lógico que hubiera la necesidad de ampliar ese acuerdo en las Cortes Generales y de ampliarlo lógicamente a Convergencia i Unió". "Y los acuerdos de Zapatero y CiU son acuerdos razonables y sensatos que sitúan bien el Estatuto de Autonomía de Cataluña dentro de la Constitución. Eso es lo que creo que debería haber aceptado Esquerra en vez de llevarse ese sofocón", añadió.
Con respecto a la oposición del PP al Estatut, López Garrido indicó que según él, sólo existen "tres reglas de juego que requieren imprescindiblemente el apoyo del principal grupo de la oposición", la Constitución, el reglamento de la Cámara y la Ley Electoral, aunque admitió que "en lo demás hay que intentar llegar a los máximos consensos" pero sin echar el freno porque "un partido sencillamente dice no sin justificación alguna".
En este sentido, consideró que no es posible la posición del PP en el Congreso de los Diputados de "decir simplemente no a todo lo que ha dicho el 90 por ciento del Parlamento de Cataluña".
No obstante, señaló que a nadie, ni siquiera al Gobierno, beneficia "el aislamiento del principal grupo de la oposición hasta ese punto". "A ningún gobierno le interesa que el principal partido de la oposición adopte esta actitud siempre contraria a todos, incapaz de llegar a acuerdos de Estado" porque, argumentó, "a un país le interesa que el principal grupo de la oposición entre en los grandes acuerdos de Estado porque eso va a dar más estabilidad" y permitirá que en el futuro no cambien las cosas "180 grados por el hecho de que gane un partido u otro".
Sin embargo, señaló que lo que tampoco puede aceptar un gobierno es que el principal grupo de la oposición "por serlo, establezca un veto y sea capaz de vetar cualquier cosa".