MADRID 30 Mar. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de ERC, Joan Puigcercós, pidió hoy al PSOE que "no deje a Cataluña a medio camino" con un Estatut que consideró insuficiente para garantizar el bienestar de los catalanes y resaltó que "todavía hay tiempo" para introducir cambios "sustanciales" en el texto en su trámite en el Senado.
Según Puigcercós, el Estatut que se vota hoy en el Congreso es "bueno para una región, no para una nación como Cataluña" y lamentó que el PP "gane la partida" con su estrategia del "insulto y la amenaza".
En su intervención, Puigcercós hizo una "invitación" a los partidos y el presidente del Gobierno para "aprovechar" el nuevo clima político resultante del alto el fuego permanente de ETA que deja al PP con el Estatut como "último cartucho".
De hecho, Puigcercós incluso atribuyó la ausencia del presidente del gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en el hemiciclo al clima de "acoso y derribo" instado por los populares. "Con este clima no se puede negociar", lamentó, pero recordó que "la palabra paz es muy poderosa" y "hará recapacitar a quienes apoyan al PP" en su estrategia.
"Cataluña necesita más. Cataluña merece más", sentenció. Puigcercós señaló que "hay una oportunidad" para "no dejar a Cataluña a medio camino" y abogó por introducir cambios "sustanciales" en el trámite del Senado para dotar a Cataluña de la "consideración nacional, la financiación, infraestructuras y competencias que merece".
Puigcercós aseguró que "ningún partido catalán va a renunciar a mejoras", por lo que instó al PSOE a "aguantar el tipo" ante el PP y "tender una mano a Cataluña, que ha sido leal y solidaria". "Depende del PSOE", insistió, que el resultado de estos meses de negociación sea "un Estatut con ERC o sin ERC", convencido de que "vale la pena intentar" introducir cambios para incorporar a los republicanos.
NO, POR REALISMO.
El dirigente de ERC atribuyó el 'no' de ERC al Estatut al "realismo" de su formación ante un Estatut "recortado" que "se cierra en falso" y que supone "hipotecar a las próximas generaciones". Además, auguró que, de no introducir cambios, en "tres, cuatro o cinco años" se abrirá un nuevo debate sobre la financiación o las competencias.
Puigcercós fue especialmente crítico con el sistema de financiación que incluye el texto y reclamó un modelo que "evite la perversión de las coyunturas electorales". Según Puigcercós, "no es sólo cuestión de dinero", sino de poner unas "reglas del juego claras para descentralizar el poder" en cuyo impulso Cataluña "actúa de rompehielos" en beneficio de todas las autonomías.
Según Puigcercós, el que se vota hoy es "un buen Estatut para España, no para Cataluña" y esgrimió problemas como la deslocalización empresarial, la inmigración o los jóvenes para advertir que "sin más recursos, Cataluña está abocada a un conflicto social". También reclamó "respeto" para el "sentimiento legítimo" de "nación" catalana y la necesidad de preservar el futuro de la identidad, la lengua y la cultura catalanas.