El presidente del Senado quiere que el trabajo para reformar la Cámara empiece tras el Estatut, "una vez que baje la tensión"
MADRID, 16 Abr. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Senado, Javier Rojo, cree que se ha hecho "un gran trabajo" en la reforma del Estatuto catalán y que el resultado es un "gran instrumento" para que Cataluña avance "en la senda constitucional" y para el desarrollo también del país. Por otro lado, Rojo cree que Cataluña ha demostrado "siempre" su "lealtad" a las instituciones y a la Constitución, por lo que no entiende las "dudas" sobre las intenciones catalanas, "todo eso que dicen que se rompe y devalúa".
En una entrevista concedida a Europa Press, el también dirigente del PSE explica que el nuevo Estatut es "un instrumento acorde a los tiempos de la España de hoy". "¿Que a unos les parece mucho y a otros poco? Yo creo que es una definición interesante de cómo estamos", agrega, para explicar que entre los dos "polos" que forman PP y ERC hay una "gran posición" intermedia "que ha hecho un gran esfuerzo".
En su defensa del texto, que aún está en tramitación precisamente en el Senado, Javier Rojo explica que la propia definición de la nación y de la nacionalidad catalanas son a su juicio correctas: la primera, recogida en el preámbulo como expresión del Parlamento catalán "y haciendo clara alusión al artículo 2 de la Constitución"; la segunda, recogida "perfectamente" en el artículo 1 del Estatut "como se definía en 1979".
"No es nada raro ni que vaya en contra de España. Pero si todavía queda alguna duda, pues está el Tribunal Constitucional, que lo que diga será lo que habrá que poner", advierte el dirigente socialista. "A estas alturas andar discutiendo de esto...", agrega. A su juicio, en este proceso "ha habido demasiado discurso ruidoso, por llamarlo suavemente, frente a la realidad, que era otra", critica.
Acerca de cómo se ha llevado este y otros debates sobre el Estatut en el seno socialista, Javier Rojo cree que dirigentes como Alfonso Guerra han cambiado su criterio sobre el proyecto catalán tras el trámite parlamentario. "Le he escuchado (a Guerra) declaraciones antes del trámite, cuando llegó el proyecto, y le he escuchado después y la posición no es la misma. Si de un texto de 230 artículos, se han modificado más de 140, no se puede decir que las cosas no han cambiado", justifica.
En cuanto a lo que vaya a pasar en el Senado, Javier Rojo defiende que el trabajo de esta Cámara no va a ser "estéril". "Yo no aventuraría lo que va a pasar", señala en relación a que cualquier cosa que se haga en este trámite será invalidado por el Congreso. De lo que sí está seguro es de que los pasos se darán a un ritmo, de acuerdo al reglamento, que permitan llegar a un referéndum en Cataluña el 18 de junio.
LA REFORMA DE LA CÁMARA
Como presidente del Senado, pero también por convicción, Javier Rojo es un firme defensor de la reforma de esta Cámara para que sea foro de encuentro de las Comunidades Autónomas, de participación en el gobierno del país, de toma de decisiones en común. Las reformas estatutarias en marcha, a su juicio, "avalan esta posición".
Javier Rojo agrega que una vez que se apruebe el Estatut en la Cámara, "una vez que baje la tensión", quiere que el Senado se ponga manos a la obra en su reforma. "Mi intención es que aprobado el Estatut, pulsando la opinión de los portavoces, tener la posibilidad de iniciar los trabajos", explica. Hay una ponencia para este fin cuya creación está aprobada desde el año pasado, tras el Debate sobre el estado de las Autonomías, pero que no ha sido constituida.
"Insisto en que tiene que ir en serio, no se trata de crear una ponencia para alargarla en el tiempo. Hay que tener la voluntad de una reforma, no podemos iniciarla para que no salga, más fracasos, no. Pero soy optimista, una vez que baje el clima de tensión, creo que la predisposición de todos será de otra manera", asegura.
"Me conformaría con que en esta legislatura dejásemos cerrado todo para que la reforma sea una realidad en la próxima legislatura", continúa Javier Rojo. Cree que la posición de los partidos es en general favorable y espera que Manuel Fraga, ahora senador tras dejar la Xunta de Galicia, aporte su "convicción" sobre la reforma a la Cámara, "porque es tan entusiasta como yo".
Sobre qué aceptaran los partidos nacionalistas, si creen en un Senado en el que todas las Comunidades se encuentren en pie de igualdad, Javier Rojo insistió en que ese debate se planteará cuando se profundice en el modelo de la nueva Cámara pero que, de entrada, no ha escuchado una negativa a dar pasos.
"Habrá que ver qué quiere aportar cada uno a la reforma, porque urge. Hay que reformarla por su utilidad hoy, pero, evidentemente, muchísimo más de cara al futuro, un futuro que va por la descentralización, por dar contenido cada vez mayor a las Comunidades Autónomas dada la respuesta que están dando a los problemas", concluye.
