MADRID, 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
PSOE y PP defendieron esta tarde ante el Pleno del Congreso su acuerdo para reformar el Estatuto balear, un texto que será aprobado por la mayoría de la Cámara pero ante el que mantendrán su abstención IU-ICV y ERC. Ambos grupos exigieron la equiparación del catalán al castellano para votar a favor.
El texto debatido esta tarde incluye nueve enmiendas introducidas en comisión por PSOE y PP con propuestas de ERC e IU-ICV, la mayoría de ellas modificaciones sobre el capítulo de derechos y deberes. Ambos partidos mantuvieron el resto de enmiendas esta tarde, aunque ninguna de ellas será aprobada.
El debate de la reforma se inició con la intervención de la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, quien aseguró que el apoyo del PP, y que se trate de una propuesta planteada y defendida por una comunidad gobernada por los 'populares', que estas demandas "son tan necesarias como sentidas".
El secretario general del PSIB y diputado, Francesc Antich, defendió el su apoyo al texto para lograr que la comunidad balear pueda afrontar los retos del siglo XXI. Según subrayó, significa avanzar en el autogobierno, facilitar un más democrático y "eficaz" funcionamiento de las instituciones, aumentar los derechos de la ciudadanía, así como consolidar lo "simbólico y lo identitario". Además, posibilita afrontar retos e inversiones "muy necesarias" para la mejora de la economía balear y del bienestar y la calidad de vida de sus ciudadanos.
En este sentido, destacó que contempla un mayor reconocimiento del hecho insular, un profundo esfuerzo y democratización de las instituciones propias, la creación del Consell de Formentera, la creación de una nueva lista electoral para los Consells, un nuevo título de derechos, deberes y libertades, y una regulación "más meticulosa" de los aspectos económicos-financieros y de las competencias.
Antich defendió los distintos capítulos del estatuto, entre ellos, el de la lengua. Señaló que mantiene la unidad del catalán, su cooficialidad, y la obligación de los poderes públicos de normalizarla, así como la protección de las modalidades propias existentes en las islas -este punto logró el consenso necesario durante el trámite en el Congreso-.
La portavoz del PP, María Salom, aseguró por su parte que el de hoy es un "día importante" para los baleares, para los consejos insulares, sobre todo el nuevo de Formentera, para las islas, redactado con espíritu de consenso. "Si en otros estatutos no se hubiera actuado con sectarismo y afán prepotente de marginar al PP, estoy segura de que los españoles lo hubieran agradecido", afirmó.
Acusó al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de haber iniciado un proceso para cambiar "las reglas del juego" y "privilegiar a unos frente a otros". "Desde Baleares necesitábamos hacer oír nuestra voz y hacer valer una posición propia en el proyecto común que es España. Lo hemos conseguido", aseguró.
También diferenció este texto "de otros" y defendió todos los capítulos. De la lengua dijo que "no es factor de separación" con este Estatuto y de la financiación, que responde a los "sobrecostes de la insularidad". También subrayó cómo se ha recogido la identidad balear, rechazando "ensoñaciones totalitarias de algunos que nos pretenden encorsetar en países imaginarios". "Es la revolución tranquila que queremos hacer en Baleares", resumió María Salom.
ENMIENDAS DE IU-ICV Y ERC
IU-ICV y ERC defendieron sus enmiendas, manteniendo las posturas que adoptaron durante el debate en la Comisión Constitucional. La diputada de la coalición Isaura Navarro afirmó que el texto se queda "a medio camino", y lamentó que no se haya podido lograr un acuerdo sobre la lengua, la equiparación de los deberes de los ciudadanos ante el castellano y el catalán, algo que, según dijo, habría posibilitado un consenso "mayor" y que su grupo pasara de la abstención al voto a favor.
En este sentido, también criticó que este Estatuto no marque el "destino" de la financiación estatal y se preguntó si el PP quiere usar ese dinero para "tapar" casos de corrupción, al tiempo que lamentó las negativas de PP y PSOE relativas a sus propuestas sobre incrementos de competencias o la gestión directa de puertos y aeropuertos. Por tanto, acusó a los dos grupos mayoritarios de haberles faltado un "impulso" para convertir a Baleares en una Autonomía de "primer orden", como otras cuyos Estatutos "se han reformado ya".
El diputado de ERC Agustí Cerdà por su parte, volvió a defender las enmiendas de su grupo, para lograr "al menos" lo mismo que en el "País Valenciano". Apuntó que es ahora cuando hay que exigir competencias y mejor financiación, para que no ocurra como en otras CCAA, en cuyos casos se "derrotaron" enmiendas de ERC sobre cuestiones que se reclaman una vez reformados sus estatutos.
Al igual que IU-ICV, lamentó que su enmienda sobre equiparación de derechos y deberes de las lenguas catalana y castellana no contara con apoyo suficiente y solicitó la votación por separado de esta cuestión (del artículo 114), apelando a la "responsabilidad" del PSOE de apoyarla. Esta regulación, aclaró, hubiera cambiado la abstención de ERC por un voto a favor.
PNV Y CIU, A FAVOR, CON RESERVAS
Por parte del PNV, el diputado Aitor Esteban explicó el voto a favor de su formación porque los nacionalistas vascos, dijo, "siempre" respaldarán aquellos textos que vengan de los parlamentos autonómicos.
Dicho esto, aprovechó para felicitar a los ciudadanos de Baleares por haber conseguido reformar su Estatuto, una oportunidad que, lamentó, les fue negada a los del País Vasco cuando se presentó en las Cortes el denominado 'Plan Ibarretxe'. "Esta Cámara se lo negó a la ciudadanía vasca, y eso que tenía una mayoría suficiente en el Parlamento vasco", recordó.
En la misma línea que los nacionalistas vascos, CiU, en boca del diputado Jordi Xuclà, aseguró que también votaba a favor de esta reforma estatutaria en base al criterio de "respeto" a lo aprobado en la Cámara autonómica, como así, apuntó, les hubiera gustado que hubiera ocurrido con el Estatut catalán.
Durante su intervención, Xuclà también defendió que los debates y las votaciones de reformas estatutarias como la de hoy "ponen de relieve" que el PP ha practicado la "autoenmienda" y la "autoimpugnación" tras la postura ante el Estatut. Por último, valoró positivamente que el texto de la reforma del Estatuto incorpore la unidad de la lengua catalana, un reconocimiento que consideró "indispensable", como así sostuvo su grupo durante el debate de la toma en consideración de la reforma.
