Los populares los acusan de "falta de lealtad" aunque ven "francamente improbable" la consideración del texto en noviembre
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 6 Oct. (EUROPA PRESS) -
PSdeG y BNG insistieron hoy en que el PPdeG intenta retrasar los trabajos de la Comisión de Reforma do Estatuto por las "órdenes" y el "corsé" que impone el portavoz del PP en el Congreso, Eduardo Zaplana, al proceso estatutario gallego, y anunciaron que ambas formaciones continuarán trabajando, "con o sin los populares", para intentar aprobar un nuevo texto antes de que finalice el año.
Tras la reunión de la ponencia de la comisión, socialistas y nacionalistas se mostraron "preocupados" por que no haya un impulso de los trabajos estatutarios y criticaron que el PPdeG no haya presentado aún, tal y como prometió la pasada semana, su propuesta de financiación autonómica.
En este sentido, criticaron que en la sesión de hoy no se abordara, como estaba previsto, este punto que fue justificado por la ausencia del portavoz popular de Economía, José Antón Orza.
"Estamos en tiempos límite para que, entre todos, hagamos un esfuerzo para que la ponencia siga su ritmo", señaló Rego quien denunció las injerencias de Zaplana en el proceso estatutario gallego. El pasado miércoles, el dirigente popular advirtió que su partido "no admitiría" el término nación en el Estatuto, tras la oferta de Anxo Quintana a Alberto Núñez Feijóo de mantener esta palabra, así como el "carácter nacional" de Galicia, en el preámbulo.
"Hay quien quiere poner corsés a la reforma y, si es así, auguro dificultades", apuntó Rego quien advirtió al PP de que "no bloquee" la posibilidad de reformar el actual texto estatutario por las posiciones que mantiene en Andalucía o Cataluña. "Que nade ponga a los gallegos a esperar lo que diga el Tribunal Constitucional para decidirse. Espero que no tengan esa estrategia", alertó.
Por ello, y aunque subrayó que las "alarmas no son suficientes", apeló a la cautela para conminar a los populares a continuar trabajando en la ponencia. "Aquí se trabaja con lealtad por parte de todos, pero otra cosa distinta son las interferencias de fuera", dijo en alusión al PP de Madrid.
De esta forma, advirtió que PSdeG y BNG seguirán trabajando en la ponencia. "Esperamos que también con el PPdeG para buscar fórmulas que tengan puntos de encuentro", apuntó Rego al tiempo que señaló que hay diferencias "relevantes" en el catálogo de derechos de la ciudadanía, en la definición identitaria, en la organización territorial y en estatus del gallego.
"PINCHOS DE CAFÉ Y TORTILLA"
En el mismo sentido se manifestó el portavoz parlamentario del BNG, Carlos Aymerich, quien recalcó que en la ponencia se está para trabajar y no para "tomar pinchos de tortilla o café". "Hay que hablar y tomar decisiones porque ya llevamos igual desde abril", criticó.
Por ello, subrayó que su grupo trabajará con el PSdeG para impulsar los trabajos para "no caer en el ritmo que quiere marcar el PPdeG". Así, destacó los acuerdos de la ponencia, pero criticó que "no se haya entrado en lo sustancial". Además, denunció las "ingerencias" de Madrid y subrayó que "quien manda en el PPdeG es Génova". "Quintana hizo una propuesta el pasado martes y el delegado de Zaplana en Galicia -en alusión a Núñez Feijóo- no se atrevió a decir nada", ironizó.
De esta forma, recordó que el plazo para tener un nuevo texto es este mismo año. "Esa es nuestra aspiración y con ese plazo seguiremos trabajando", anunció al tiempo que aclaró que, según estas previsiones, el debate de toma en consideración se tendría que producir en noviembre.
"Yo lo veo francamente improbable y si eso es así, no será por el PPdeG, sino porque no hay tiempo para cumplir todos los procedimientos", contestó el portavoz del PPdeG, Xesús Palmou, quien apuntó que una vez alcanzada una propuesta en la ponencia, ésta tiene que ir a la Comisión, luego pasar a la Mesa del Parlamento para que la publique y abrir un plazo de enmiendas.
"RITMO HABITUAL"
Palmou quiso aclarar que los trabajos de la ponencia "siguen su ritmo habitual" y negó que haya retrasos. Así, subrayó que, aunque no comenzó hoy a hablar de la financiación, se pasó al capítulo de la reforma estatutaria. "Si no hubiera voluntad de trabajo por nuestra parte, diríamos que hoy no nos reuniríamos", añadió.
Así, explicó que si hoy no se habló de financiación fue por la ausencia de Orza, aunque aclaró que, en la sesión de hoy, faltaron, también, sendos diputados de PSdeG y BNG. Asimismo, explicó que no presentaron el texto sobre financiación porque lo hacen siempre que discuten ese punto.
Por ello, criticó a estos partidos por su "falta de lealtad y rigor" por acusar a los populares de intentar retrasar los trabajos. "Es curioso, siempre lo dicen ante los medios de comunicación, pero no en la ponencia", se quejó.
En el mismo sentido, negó que haya injerencias de Madrid y subrayó que la postura de Núñez Feijóo sobre el Estatuto "quedó muy clara" durante el debate del Estado de la Autonomía. Sobre las palabras de Zaplana, matizó que es el portavoz popular en el Congreso y "puede manifestar lo que crea conveniente". "Nosotros no lo consideramos injerencia", concluyó.
