SAN SEBASTIAN, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de San Sebastián, Odón Elorza, afirmó hoy que la capital guipuzcoana "no puede tener en su seno ni albergar comandos de la muerte" como el Donosti, desarticulado la pasada semana por la Guardia Civil, porque es "incompatible" con su trabajo a favor de la paz.
Asimismo, manifestó su "solidaridad, cariño y apoyo absolutamente a todas aquellas personas que hayan podido ser objeto de seguimiento" del comando desarticulado, al tiempo que expresó "el rechazo, condena y asco" que le produce "esa situación que se ha creado de nuevo".
Elorza realizó estas declaraciones en el Palacio Miramar durante la presentación de su candidatura para las elecciones del 27 de mayo, donde reiteró que el Gobierno de la ciudad está "trabajando permanentemente para acercar la paz" y para "concienciar a la ciudadanía de que tiene que tomar una actitud activa en defensa de la misma y en rechazo y condena de todo tipo de actos de violencia, de extorsión, o de amenazas terroristas".
El alcalde socialista se refirió, como ejemplo, al reciente Festival de Cine y Derechos Humanos, con el objetivo de "concienciar, sensibilizar a todos, especialmente a los jóvenes en la dirección de que hay que respetar la vida, el pluralismo, actuar desde el ejercicio de los derechos democráticos y todo lo demás es absolutamente rechazable y condenable".
Asimismo, citó los homenajes a las víctimas, como el monolito colocado en Alderdi Eder, o el proyecto del 'Jardín de la Memoria'. Según dijo, "no hay ayuntamiento en Euskadi que esté trabajando tan activamente siempre en favor de la paz, en favor de los derechos humanos y en el rechazo a las actitudes de violencia, amenaza y extorsión".
No obstante, matizó que "otra cosa es que la coyuntura política o las circunstancias, a veces, te hagan tener más confianza en que algún día llegará de verdad la convivencia en paz y en libertad para toda la ciudadanía donostiarra, vasca y española en general".
Para Elorza, una "ciudad amiga", lema de su campaña electoral, "no es compatible, no puede tener en su seno, no puede albergar comandos de la muerte". De esta forma, reconoció que "hay todavía muchos obstáculos que superar y muchas decisiones políticas que tomar, muchas de ellas superan lo que es el marco competencial de un Ayuntamiento", pero insistió en que "nunca nos hemos quedado atrás en este combate por la paz. Somos una ciudad de vanguardia le pese a quien le pese".
Por último, expresó su "más absoluta solidaridad y apoyo", algo que consideró que debería hacer "toda la ciudadanía demócrata", a las personas que "han podido ser objeto de seguimiento o de señalamiento por parte de miembros presuntamente de un comando de ETA". En ese sentido, afirmó que le "repugna que haya comandos que encima lleven como denominación una parte del nombre de esta ciudad".
