ETA.- El Gobierno de Navarra dice que la entrevista desautoriza los informes del Gobierno central

PAMPLONA, 15 May. (EUROPA PRESS) -

El portavoz del Gobierno de Navarra, Alberto Catalán, afirmó hoy que el contenido de la entrevista a miembros de ETA desautoriza los informes de verificación del Gobierno central en relación con el alto el fuego. Según dijo, "evidentemente sigue habiendo extorsión, coacción, presión y amenazas".

Para el Ejecutivo foral, es "incomprensible" que el Ejecutivo de Rodríguez Zapatero mantenga "su empeño de verificar la situación generada" y se ampare en tres informes "para justificar su criterio y su postura".

El Gobierno de Navarra, en su habitual sesión de los lunes, analizó el contenido de la entrevista de presentantes de la banda terrorista al diario Gara y a través de un comunicado de cinco puntos destacó que "ETA no ha renunciado a ninguno de sus objetivos políticos".

"Sigue hablando de autodeterminación, de territorialidad, en donde involucra a Navarra, y de amnistía. No renuncia absolutamente a nada y mucho menos a las armas, a la coacción y a la presión", leyó Catalán, quien añadió que quien no crea que esto es así "se engaña a sí mismo y, lo que es peor, pretende engañar a los demás".

El Gobierno foral constata en la entrevista que "Navarra sigue siendo una obsesión enfermiza para la banda terrorista ETA", que persigue "incorporar a los navarros a quimeras nacionalistas que vienen denominándose como Euskal Herria y que no están más que en sus propias mentes".

Igualmente, el Ejecutivo, aunque sin sorprenderse, destacó que ETA no ha condenado ni desautorizado los últimos atentados, entre ellos el de Barañáin, ni la extorsión a la que se ha sometido a diferentes empresarios. "Todo lo contrario, los justifica y los ampara", prosiguió Catalán, que tras tachar de "incomprensible" el "empeño" de Zapatero en verificar la situación generada tras el alto el fuego, insistió en que la entrevista evidencia que "sigue la extorsión y la amenaza".

Finalmente, el Gobierno navarro se reafirma en las ideas expresadas en sus resoluciones y en las del Parlamento de Navarra. "No hay precio político para un posible diálogo con los terroristas, Navarra en ningún caso es negociable y no puede ser moneda de cambio, se debe llevar a cabo un reconocimiento y justicia para con para las víctimas del terrorismo etarra y una exigencia para que el Gobierno de España y de manera especial Zapatero hable claro y diga la verdad a la sociedad española", reiteró Catalán.

RESPALDO A SANZ

Catalán señaló, en relación con los atentados y con las cartas de extorsión, que este tipo de comportamientos eran considerados "actos terroristas" antes del alto el fuego.

Tras preguntarse "por qué ahora no", criticó que ETA no condenara o desautorizara los atentados, "como ha hecho en otras ocasiones cuando así les ha interesado", y que incluso sus representantes llegaran al "cinismo" de responder que obedecían al sentimiento popular de represión. "Independiente de que diga que no ha ordenado los atentados, independiente los ampara y lo justifica", sacó la conclusión.

Catalán añadió que, pese a que los informes de verificación sostengan que los atentados no fueron ordenador por la dirección de ETA, "nos debe dar igual que sean ordenados directamente por la dirección o sea 'kale borroka' o del entramado de ETA u otra persona individual o colectivo", porque estos hechos antes se denominaban "actos terroristas". "Los autores de estos atentados se mueven dentro del entorno de ETA y lo viene a justificar la propia banda al no condenado o desautorizarlos", insistió.

Por otro lado, ante las críticas de ETA al presidente Miguel Sanz, Alberto Catalán señaló que el Gobierno ratifica y comparte todas las medidas del jefe del Ejecutivo, "sean o no del agrado de ETA". Destacó que Sanz habla "con claridad".