ETA.- El juez autoriza la manifestación por los presos de Bilbao aunque prohíbe la exhibición de fotografías de etarras

Presentación De Manifestación Contra La Dispersión De Presos.
EUROPA PRESS
Actualizado: viernes, 30 diciembre 2011 18:00

Permite el acto contra el criterio del fiscal pero advierte que será disuelto si se profieren procalamas a favor de la banda terrorista

MADRID, 30 Dic. (EUROPA PRESS) -

El juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska ha autorizado la manifestación en defensa de los derechos de los presos de ETA convocada el próximo 7 de enero en Bilbao aunque ha impuesto varios requisitos para su celebración, entre ellos la prohibición de que durante su desarrollo se exhiban fotografías de miembros de la organización terrorista.

En un auto dictado este viernes, Marlaska rechaza la petición de prohibición que planteó la asociación Dignidad y Justicia (DyJ), para la que el acto constituía un delito de enaltecimiento del terrorismo, y permite su celebración después de fijar "una serie de cautelas" que, de ser incumplidas, conllevarían la "inmediata disolución" de la marcha.

En contra del criterio de la Fiscalía, que solicitó la suspensión del acto, el juez instructor prohíbe que en la convocatoria del acto pueda incorporarse la denominación de "presos políticos" --que constituye una "tergiversación del lenguaje"-- o que durante su curso se exhiban "fotografías de presos por actividades de la organización terrorista ETA y de aquellas otras que dependen de la misma".

Tras indicar que estas dos circunstancias determinan "una voluntad de justificar sus criminales conductas y un correlativo menosprecio de quienes han sufrido la violencia", Grande-Marlaska ordena a los Gobiernos vasco y navarro y a las dos Delegaciones del Gobierno que den las ordenes oportunas para que "se retiren los anuncios" que incluyan imágenes de etarras o referencias a los "presos políticos".

PROHIBIDAS LAS PROCLAMAS A FAVOR DE ETA

Además, insta a la Ertzaintza a proceder a la "inmediata disolución" de la marcha en el caso de que los manifestantes profieran "proclamas" a favor de la organización terrorista. "Disolución que deberá materializarse de forma inequívoca, independientemente de la intensidad del incumplimiento y sin valoraciones complementarias, que únicamente conllevarían la consumación de un acto penalmente relevante", puntualiza el magistrado.

A fin de "evitar cualquier entendimiento de la limitación del ejercicio del derecho de manifestación", el juez también oficia al Departamento de Interior del Gobierno vasco para que "de forma inmediata" ponga estas restricciones en conocimiento de la plataforma convocante al objeto de que adopte "las medidas de prevención y seguridad que estimen oportunas".

La manifestación, convocada por el movimiento ciudadano 'Egin Dezagun Bidea' (Hagamos camino), reclama el traslado al País Vasco de los reclusos de la banda terrorista. De igual modo, insta a la derogación en España de la 'doctrina Parot' y de la cadena perpetua que se impone en Francia, así como a la liberación de los penados que hayan cumplido las tres cuartas partes de la condena.

Los convocantes también piden la liberación de los presos gravemente enfermos y que la política penitenciaria que aplican los estados español y francés se sitúe en "claves de resolución, para incidir en positivo en la vía abierta para la solución del conflicto que vive el País Vasco". Para impulsar el cambio de la política penitenciaria, Bildu llevará se unirá a la manifestación del 7 de enero en Bilbao, que también apoyarán un total de 400 ex presos de la banda.

La asociación presidida por Daniel Portero, hijo del fiscal Luis Portero, asesinado por ETA en 2000, explicaba en su escrito denunció que en el cartel de la convocatoria aparecían las imágenes de los etarras Nerea Garaizar San Martín e Iñaki Lizundia Álvarez. En este sentido, recordaba que el Tribunal Supremo considera delito exponer fotografías de personas condenadas por terrorismo, tal y como estableció en la sentencia sobre la txozna de 'Txori Barrote' en la que sostuvo que esta actuación constituía una "alabanza de los actos terroristas o apología de los verdugos".