SAN SEBASTIAN, 6 Dic. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de LAB, Rafa Díez Usabiaga, se sumó hoy a las declaraciones sobre el proceso de paz realizadas por el secretario general de UGT-Euskadi, Dámaso Casado, y consideró que sería "importante" que José Luis Rodríguez Zapatero "se hiciese eco de sus palabras" porque "es hora" de que todas las organizaciones políticas, incluida la izquierda abertzale, "tengan ya unas condiciones democráticas para poder abordar un diálogo en las mismas condiciones de igualdad para el desarrollo de sus proyectos políticos".
Díez Usabiaga realizó estas declaraciones en el transcurso de una concentración llevada a cabo por el sindicato LAB bajo el lema 'Inposaketarik ez! Lan egutegi propioaren alde!' (Imposición no, a favor de un calendario laboral propio) en el Boulevard de San Sebastián.
El secretario general de LAB afirmó que hay "elementos interesantes" en las palabras de Casado porque "se plantea que es hora de que Zapatero dé pasos adelante y rompa el pressing político y social que se le está haciendo desde el PP y otras organizaciones, así como que también haga cambios jurídicos para que la izquierda abertzale pueda actuar en política como cualquier otra organización".
A su jucio, esas referencias las "tenía que tener muy en cuenta" el propio Gobierno del PSOE porque "no es de recibo que después de ocho meses de alto el fuego declarado por ETA todavía la izquierda abertzale esté sufriendo las consecuencias judiciales y políticas de una etapa anterior, de unas terapias que PP y PSOE llevaron en otros momentos".
"Ha quedado muy claro que no se va poder construir el futuro con actuaciones judiciales y políticas que corresponden al pasado y nunca podrán servir para construir un escenario de soluciones", subrayó.
Por otro lado, el dirigente de LAB reiteró que la Constitución española "niega los derechos de este pueblo" ya que no recoge "el derecho a decidir libre y democráticamente nuestro futuro y es un instrumento jurídico que está planteado para que el conflicto político se mantenga".
En su opinión, la Constitución "no puede ser nunca freno ni muro a la voluntad popular de los vascos y la legalidad vigente siempre se tendrá que amoldar a la posición mayoritaria de la sociedad vasca", algo que tiene que ser "el elemento central convergente para poder construir un acuerdo político".
Asimismo, criticó que esta fiesta "significa una imposición en lo que es el calendario laboral de este país", por lo que reclamó a los Gobiernos vasco y navarro que "tengan capacidad política para poder definir un espacio simbólico vasco donde se decidan también elementos tan simples y concretos como las fiestas laborales".
