BILBAO, 28 Nov. (EUROPA PRESS) -
El portavoz parlamentario del PSE-EE, José Antonio Pastor, consideró hoy que "estamos en mucho mejor momento del que hemos estado hace muchos años" a pesar de la situación de "parálisis" y "colapso" por el que atraviesa el proceso, provocado por "el mundo de ETA y de Batasuna". En este contexto, apostó por "mantener la firmeza" y advirtió de que "las reglas son las que marcó" José Luis Rodríguez Zapatero y "no las que ellos quieren poner encima de la mesa".
Asimismo, instó a la izquierda abertzale a perder la "esperanza" en cualquier intento de "tensar la cuerda para conseguir objetivos" y, tras insistir en que su discurso "responde a otro escenario distinto" y a "un tiempo pasado", opinó que, en el momento actual, el encuentro que mantuvo el PSE con Batasuna sería "imposible".
El dirigente del PSE-EE destacó que a los socialistas se le han caído "algunos mitos de la seriedad y la solvencia de determinados interlocutores" de la izquierda abertzale "que parecían hablar en nombre de todos".
En una entrevista a RNE, recogida por Europa Press, el también secretario general de los socialistas vizcaínos se refirió al proceso de paz, asegurando que "estamos en mucho mejor momento del que hemos estado hace muchos años, independientemente de que ahora mismo se encuentre en esa situación de parálisis, de criris, que ya preveíamos que se podría producir".
En este sentido, indicó que, con la declaración de alto el fuego de ETA, "probablemente, nos hicimos demasiadas expectativas en un primer momento" y que, de esta manera, "hemos pasado de una situación de euforia excesiva quizá a una situación de excesivo pesimismo" que dijo no compartir.
Pastor reconoció que el momento actual es "serio, de cierto colapso, pero provocado por una de las partes, que es el mundo de ETA y el de Batasuna". En este contexto, apuntó que "la única estrategia lógica y la única opción de sentido común es mantener la firmeza necesaria" por parte de los partidos democráticos para "hacer ver a ETA que es absolutamente inevitable que, si quieren conseguir jugar en política desde el mundo de la izquierda abertzale, tienen que hacerlo con las reglas de juego".
Para ello, añadió, "tenemos que mandar un mensaje muy claro, como estamos creo que estamos mandando los socialistas, de que las reglas son las que marcó el presidente del Gobierno y no otras que ellos quieren poner encima de la mesa".
Preguntado por la existencia de un pacto previo por parte del Gobierno, señaló que "no es un problema de pacto previo", sino de cumplir "estrictamente" la resolución del Congreso de los Diputados, que determinaba que, una vez constatada la ausencia de violencia, el Ejecutivo estaba dispuesto a entablar un diálogo con ETA para acabar con el terrrorismo.
Por ello, a su entender, "es evidente que si la violencia se mantiene, y parece evidente que se está manteniendo" porque "hay kale borroka prácticamente todos los días y el robo de 300 pistolas no es precisamente un asunto baladí, no se están cumpliendo los requisitos que el Congreso avaló como parte previa para iniciar el diálogo".
Por tanto, insistió en que la izquierda abertzale "puede decir lo que quiera, pero aquella resolución, que fue aplaudida con entusiasmo por representantes significados de la izquierda abertzale, es la que sigue siendo válida".
De esta manera, advirtió de que, si "no está encima de la mesa el requisito previo de ausencia de violencia, el resto queda supeditado a que esto desparezca". "Y tiene que hacerlo desaparecer el protagonista principal, que es el mundo de ETA y de la izquierda abertzale. No es una responsabilidad ni del Gobierno, ni del PSOE, ni del PNV, ni de ninguno de los partidos democráticos, es únicamente responsabilidad suya", aseveró.
En cuanto a las consecuencias que podrá acarrear el robo de armas por parte de ETA, indicó que es un asunto que le corresponde "gestionar" al Ejecutivo central. No obstante, añadió que "la consecuencia más inmediata es la que estamos viendo ahora: se ha parado el proceso de paz porque no se cumple el requisito previo con el que había que seguir avanzando".
FALTA DE MADUREZ
A juicio de José Antonio Pastor, existe "un problema de falta de madurez en el mundo de la izquierda abertzale", por lo que apuntó que "quizá se nos han caído algunos mitos de la seriedad y la solvencia de determinados interlocutores que parecían hablar en nombre de todos".
"Y uno no sabe exactamente si responde a diferencias de líneas políticas, entre blandos y duros en la izquierda abertzale, o a un intento de lanzar órdagos y poner chantajes encima de la mesa para intentar torcer la voluntad del Gobierno", destacó.
En caso de que se trate de "una forma de tensar la cuerda para conseguir objetivos", advirtió de que deben perder la esperanza de que "lo van a conseguir con este tipo de actuaciones, ni con otras que puedan poner en marcha".
En cuanto a la apuesta de Batasuna por un referéndum similar al de Quebec, el dirigente socialista replicó que "el referéndum que hay que hacer en el País Vasco está perfectamente establecido" dentro del Estatuto de Gernika.
"El resto de consultas o de referendums o encuestas que se quieran plantear son procedimientos que no están establecidos dentro del marco legal de la Constitución y del Estatuto y, por lo tanto, no es el marco en el que nos vamos a mover", aseguró.
ELECCIONES
Por otro lado, se refirió a la posible presencia de la izquierda abertzale en las elecciones de 2007, recordando que, "como tal Batasuna, va a ser imposible que estén". "Ahí no hay medias tintas y Batasuna es una marca que no existe, está desaparecida legal y jurídicamente por la sentencia del Supremo, por lo tanto es imposible que se presente como Batasuna", señaló.
De esta manera, indicó que "deberían hacer el esfuerzo necesario para que todo ese mundo" pueda tener una representación política, pero "exigiéndole los mismos requisitos que se nos exige al resto de partidos democráticos: respeto a las reglas de juego, el acatamiento de la ley y, a partir de ese momento, yo estaría encantado de que pudieran presentarse".
El portavoz parlamentario del PSE se refirió también a las demandas de autodeterminación y territorialidad de Batasuna, destacando que "esos conceptos" no se recogían en Anoeta. De esta manera, indicó que, por el contrario, lo que plantean ahora es "volver el discurso hacia atrás" y plantearlos "en unos términos que son absolutamente inasumibles para los demócratas".
"La sociedad vasca ha recorrido ya un camino muy importante, no comparte para nada ese tipo de planteamientos, no va a consentir ninguna vuelta atrás y los únicos responsables de que se frustre este planteamiento van a ser exclusivamente ellos", agregó.
En esta línea, insistió en que, aunque "no se sabe exactamente el grado de relación-subordinación" entre ETA y Batasuna, y "si hablan en nombre de uno, de dos o de parte", es "evidente que lo que están diciendo" los dirigentes abertzales "casa muy poco" con las palabras de Arnaldo Otegi en Anoeta. "Responde a otro escenario distinto, a un tiempo pasado", aseguró.
En este contexto, el portavoz socialista insistió en que el encuentro entre dirigentes de PSE y Batasuna del pasado verano "fue necesario" para intentar conseguir que "este mundo entrase dentro del mundo de la política" pero reconoció que, "hoy por hoy, hay que constatar que no sirvió para el objetivo planteado" y, por lo tanto, que "esa reunión en el momento actual esa reunión hoy mismo sería imposible".