ETA.- PP dice que si ha habido reunión con ETA, el Gobierno no les dijo nada a pesar de que se comprometió a informarles

Advierte a Zapatero de que no acepta el "doble juego" de negociar con ETA sin que está desaparezca y con el respaldo del PP

Europa Press Nacional
Actualizado: miércoles, 20 diciembre 2006 12:11
MADRID, 20 Dic. (EUROPA PRESS) -

El secretario general del PP, Angel Acebes, admitió hoy haberse enterado por la prensa de que el Gobierno podría haber mantenido la semana pasada su primera entrevista oficial con ETA y aseguró que "si se ha producido esa reunión" el Ejecutivo no les había dicho "nada", "a pesar" de que ha reiterado que "mantendría permanente y personalmente informado" a Mariano Rajoy "sobre estos encuentros".

En declaraciones a Onda Cero recogidas por Europa Press, Acebes denunció asimismo que la preparación del encuentro previsto entre el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero y el líder del PP, Mariano Rajoy, ha sido "un poco extraña".

El 'número dos' afirmó desconocer para qué ha convocado el presidente del Gobierno a Rajoy y relató que fue la secretaria de La Moncloa quien llamó a la secretaria del presidente del PP para comunicarle que Zapatero quería reunirse con él. "La preparación (del encuentro) ha sido un poco extraña. No sabemos cuál es el orden del día, los temas que quiere abordar el presidente del Gobierno, aunque podamos suponer de qué se trata", indicó.

Acebes reiteró que Rajoy le comunicará al jefe del Ejecutivo que "no puede haber un precio político" a ETA por dejar de matar, ni "negociación mientras no abandone el terrorismo", que "no se puede legalizar a Batasuna mientras ETA exista", que "Navarra no puede ser moneda de cambio de nada" y que "es necesario que todas las instituciones del Estado de Derecho empezando por la Fiscalía General actúen con toda contundencia desde la ley" contra el terrorismo.

Según el dirigente 'popular', para que Rajoy saliera de su encuentro con Zapatero con un mensaje positivo, el presidente del Gobierno debería comprometerse con esas cuatro líneas rojas planteadas por los 'populares'.

"MUY PREOCUPANTE" QUE EL PSOE SE REÚNA CON BATASUNA

Por otra parte, Acebes manifestó su preocupación ante unas declaraciones de ayer del ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, en las que defendía la creación de una mesa de partidos extraparlamentaria, aunque matizaba que para encauzar los pactos que se hayan alcanzado, era necesario ir a las instituciones.

El 'número dos' del PP consideró "muy preocupante" que el PSOE "pueda reunirse en una mesa con Batasuna-ETA (...) sin que ésta haya desaparecido", ni "abandonado la violencia" ni "entregado las armas" y debatan "de tú a tú, fuera de las instituciones democráticas sobre el futuro de Navarra, el País Vasco y por tanto de España".

"¿A alguien le parece poco reconocer como interlocutor a una banda terrorista que está anunciando su convocatoria de actos para hoy con unos carteles cuya fotografía es una pistola? ¿Es que se puede consentir que se sienten en una mesa para hablar del futuro de todos los españoles (...) después de haber robado 350 pistolas? (...) ¿Es que es posible que se vote en contra de que Navarra no seA moneda de cambio?", se preguntó para justificar la opinión del PP sobre que el Gobierno está pagando un precio político a la banda.

En este sentido, Acebes consideró que los hechos han demostrado que la banda no tiene "intención" de abandonar la violencia, por lo que advirtió a Zapatero de que no puede pretender "un doble juego": hablar con ETA "sin que desaparezca y negociando" y a la vez que esto lo haga "con un acuerdo" con el PP.

"Es una cosa o la otra", remachó, y subrayó que desde el primer momento Rajoy le dijo al presidente del Gobierno que podía contactar con ETA para "comprobar" que había decidido "disolverse" y "si esto no es así", el Estado tiene que utilizar "todos los instrumentos que le permite la ley para derrotarla como única garantía de que no va a seguir actuando".

Además, alertó de que aceptar el "chantaje" de una banda terrorista "con tal de que no haya un muerto", podría mover a cualquier otro grupo criminal a usar las víctimas mortales para obtener años después sus objetivos.

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