ETA.- El presidente navarro dice que ha sido el Gobierno el que ha "roto los puentes" con el PP y que Rajoy lo ha dicho

Considera contraria a la ley de partidos la reunión PSE-Batasuna y espera que el Gobierno "tenga valor de derogarla y asumir el coste"

Europa Press Nacional
Actualizado: miércoles, 7 junio 2006 14:15

MADRID, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Gobierno de Navarra, Miguel Sanz, manifestó hoy que el PP "no ha roto ningún acuerdo que permita acabar con el terrorismo" sino que ha sido el Gobierno el que ha terminado con "las reglas del juego de ese consenso básico para acabar con ETA", por autorizar una reunión del PSE con Batasuna y "romper algo fundamental, la lealtad entre los dos líderes de los principales partidos".

"El planteamiento de ayer de Mariano Rajoy era lógico y razonable, no tenía otro camino que decir que habían quedado rotos los puentes tendidos, aunque de manera básica, para ir juntos en este proceso", añadió el dirigente navarro durante un desayuno informativo del Foro Nueva Economía.

Miguel Sanz expuso que apoyar un encuentro del PSE con Batasuna supone "desautorizar el Estado de Derecho y legitimar el discurso de ETA, por el que ha estado matando 30 años" y agregó que su formación, UPN, nunca se sentará en una mesa al margen de las instituciones y en la que esté presente una formación ilegal.

Aseguró que esta reunión PSE-Batasuna contradice la "famosa frase" del presidente del Gobierno de primero la paz y luego la política, que él aseguró asumir. "Y no vale decir que en 1998 Aznar se reunió con Batasuna, porque encones era una formación legal y sólo se hizo para constatar si existía voluntad en el entorno terrorista para abandonar las armas". "No había pago político como lo está habiendo ahora", subrayó.

De cara al futuro, Sanz expuso que el PP debe "volver a la senda del consenso" con el Gobierno "en el supuesto de que el Gobierno actúe con la ley en la mano en todos los pasos que deben darse". El primero, dijo, no autorizar el encuentro de los socialistas vascos con la formación ilegal.

DEROGAR LA LEY DE PARTIDOS

El jefe del Ejecutivo foral insistió en que cuando Batasuna cumpla la ley de partidos "sólo entonces podrá ser legal y defender sus objetivos en las instituciones, el derecho de autodeterminación y la territorialidad". "Ellos son los que tienen que arrepentirse y pedir perdón, eso es lo moralmente justo", recalcó, para aclarar también que "nunca" será equidistante entre víctimas y asesinos y que no dejará "de llamar a las cosas por su nombre: atentados terroristas, violencia y ley".

Miguel Sanz insistió en que la sola presencia del PSE en una foto con Batasuna "es ya un precio político" a los terroristas y en que la reunión entre ambos contraviene la ley de partidos.

"Si se pretende violar la ley, téngase la valentía de tomar la iniciativa de derogarla. Votos tienen, que asuman el coste político que dicha iniciativa tendría en los ciudadanos. Porque si no, se visualiza que no lo hacen por no perder votos. O se aplica la ley o vencerán los terroristas", dijo.

NAVARRA Y LAS CONSULTAS POPULARES

El presidente del Gobierno foral expuso también hoy su convicción de que Navarra estará encima de la mesa de partidos que se organice en el País Vasco "porque la va a poner Batasuna". "Navarra ha sido, es y será un objetivo irrenunciable y toda la sociedad navarra debe saber que nunca dejarán de intentarlo", manifestó.

Por ello, agregó que es un "riesgo" que "las riendas de la Comunidad las lleven los que no creen en ella o por quienes están dispuestos a gobernar con nacionalistas que darán pasos para que Navarra deje de ser lo que es". "No es que critiquemos que el PSN pueda gobernar con los nacionalistas; criticamos que no lo diga con claridad", añadió, y se mostró confiado en que su partido en coalición con CDN volverá a tener mayoría absoluta en las próximas elecciones forales de 2007.

Miguel Sanz reiteró que no cree que el presidente del Gobierno esté siendo "claro y contundente" sobre el futuro de Navarra porque "se refugia siempre en los tópicos y el simplismo, como al decir que se cumplirá la normativa vigente". "¡Sólo faltaría! Usted tiene que decir, dentro de esa legalidad, qué piensa de Navarra", dijo el dirigente navarro dirigiéndose a Zapatero. Un órgano común entre la Comunidad Autónoma Vasca y la Comunidad Foral, agregó, sería "un primer paso hacia la federación" de ambas y una cesión a los objetivos nacionalistas y de ETA.

A propósito de esta cuestión, Miguel Sanz aseguró que se negará a la convocatoria de una consulta en Navarra sobre el futuro de esta comunidad "porque lo solicite ETA". Y en cuanto a que se convoque referéndum en aplicación de la Disposición Transitoria 4ª de la Constitución Española, que prevé el mecanismo de incorporación de Navarra al País Vasco, recordó que la pregunta debería ser en positivo, es decir, para solicitar el apoyo a esa fusión, por lo que animó a los defensores de esta posibilidad a plantear la iniciativa en el Parlamento de Navarra. "El miedo lo tienen ellos, que no convocan el referéndum", dijo.

Respecto a las formaciones nacionalistas, Miguel Sanz apuntó también que le parece un "sarcasmo" que se hayan reunido para presentarse a las elecciones generales en una formación denominada Nafarroa Bai (Navarra, sí) en vez de Nafarroa Ez (Navarra, no), puesto que defienden la disolución de la Comunidad Foral en Euskadi, dijo.

A propósito de la situación de Volkswagen Navarra, Sanz dijo que a su juicio el problema de la factoría de Landaben no se debe "a los problemas generales de la industria de deslocalización" sino al desencuentro entre UGT y CCOO en este conflicto laboral. "La unidad de acción está muy deteriorada y es un peligro enorme, porque existen sindicatos nacionalistas que actúan más movidos por criterios políticos que laborales", argumentó.

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