MADRID 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente del PP, Mariano Rajoy, acudirá mañana a La Moncloa para reunirse con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, atendiendo a su "responsabilidad" como jefe de la oposición, según explicó a sus parlamentarios en una cena que tuvo lugar el pasado miércoles. No obstante, ayer decidió que no será allí donde informe a la prensa de lo tratado con Zapatero, sino en la sede central de su partido, ubicada en la madrileña calle 'Génova'.
Tras nueve meses de desencuentros en lo que a política antiterrorista concierne, ésta será la sexta reunión pública (hubo otra privada) que ambos mantienen en esta legislatura. Sin embargo, será la primera en la que un portavoz gubernamental informe a la opinión pública desde el Palacio de La Moncloa y, el líder de la oposición, renuncie a hacer lo propio y se traslade a su sede para dar cuenta de lo acontecido.
Rajoy ya ha adelantado, en estos días, que se propone acudir a esta cita a "escuchar" cuanto le tenga que decir el presidente y a recalcar que rechaza cualquier negociación política con ETA o con Batasuna, además de los "cambios de posición" de la Fiscalía o la presentación de la ilegalizada formación 'abertzale' a las elecciones de mayo de 2007.
El presidente de los 'populares' insiste en que su discurso es "previsible", puesto que no piensa cambiar los ejes argumentales que ha venido sosteniendo, en esta materia, durante los últimos meses: De hecho, su agenda no le permitirá demasiados preparativos en la víspera puesto que, tras haber participado en dos actos de partido en Granada, llegará a media tarde a Madrid para asistir, a las 20 horas, al funeral por Loyola de Palacio que tendrá lugar en la catedral de La Almudena.
En cualquier caso, en la ya mencionada cena que mantuvo con diputados, senadores y europarlamentarios subrayó, según confirmaron a Europa Press algunos de sus asistentes, que acudir a los llamamientos del jefe del Ejecutivo no es incompatible con dejar clara su posición en lo que a estrategia antiterrorista respecta, alegando que ha aprendido de sus citas anteriores con Zapatero que, en varias ocasiones, ha llegado a calificar de "engaño".