ETA.- Tres acusados de 'kale borroka' protestan durante un juicio por haber estado incomunicados al ser detenidos

Actualizado: miércoles, 6 octubre 2010 18:49

Iruin dice que no hay pruebas subjetivas directas frente al fiscal que cree que el silencio es interesado.

MADRID, 6 Oct. (EUROPA PRESS) -

Tres acusados de actos de 'kale borroka' han protestado durante el turno de última palabra en un juicio en la Audiencia Nacional de "haber estado incomunicados" durante su detención. El juicio contra ellos y otros tres procesados ha quedado visto para sentencia.

El abogado defensor Íñigo Iruin, ha replicado al fiscal Pedro Martínez, que ya emitió ayer su informe de conclusiones finales, que "no ha existido prueba subjetiva directa porque ningún testigo apareció".

Ha pedido la libre absolución para todos los procesados --Francisco Javier Arina Echarte, Ibai Moreno Ibáñez, Imanol Salinas Ijurco, Iker Araguas Jusue, e Iñaki Marín Mercero-- excepto para Diego Javier Octavio Martinicorena, que reconoció su participación, para el que solicita un año de prisión por el delito de daño terrorista con la atenuante muy cualificada de reparación del daño.

NO POR INICIATIVA PROPIA

En el caso de Octavio Martinicorena ha recordado que el acusado declaró en la primera sesión del juicio que participó de manera "totalmente subordinada" y no por iniciativa propia, además de que aseguró que pensaba que la acción iba a consistir en hacer unas pintadas.

Durante la sesión del martes, Pedro Martínez rebajó en seis meses de cárcel y 72 euros de multa su petición de condena para Octavio Martinicorena por reparar el daño depositando el importe de la indemnización por los daños ocasionados antes del juicio. Fue el único de los acusados que reconoció su participación en los hechos. Para él, el representante del Ministerio Público solicita seis años y medio de cárcel y una multa de 216 euros.

Para los otros cinco acusados que negaron su implicación, Martínez solicita siete años de cárcel y una multa de 216 euros. Los seis están procesados por los delitos de desórdenes públicos terroristas, empleo de aparatos incendiarios y daños terroristas.

Según el informe definitivo de la Fiscalía, hay pruebas suficientes para condenar a los seis acusados, ya que, en sede policial reconocieron su participación de los hechos o otros de los acusados los implicaron en el acto, además, existe una grabación de la actuación --aunque tenían la cara tapada--, declaró un testigo que reconoció a tres de ellos como autores de los actos y un informe de inteligencia de la Policía señala a Imanol Salinas como culpable de los mismos. Octavio Martinicorena fue el único que había declarado ante un juez anteriormente que era culpable de estos actos.

SILENCIO INTERESADO

El representante del Ministerio Público también destacó el valor "positivo" que tiene el silencio cuando hay pruebas suficientes porque ninguno de los acusados respondió a sus preguntas en la sesión del lunes, además, ha considerado que en este caso, "el silencio es parcial, interesado", por lo que más aún al ser interesado.

Comparecieron en el juicio como testigos, familiares y amigos de los procesados para corroborar sus declaraciones, a lo que Martínez ha quitado "todo valor probatorio" por la "falta de subjetividad" al estar relacionados con los acusados. Además, recalcó que uno de los testigos que dijo haber estado en las fiestas de un pueblo vecino al suyo no conocía el nombre del patrón de la fiesta, lo que provocó risas entre el público.

Durante el juicio se visionó un video en el que se puede observar a un grupo de personas cortando un calle con contenedores incendiados y quemando dos cajeros automáticos con 'cócteles molotov' en alrededor de un minuto mientras los viandantes huían.

SOBRADAMENTE CONOCIDOS ENTRE LOS RADICALES

Durante la prueba pericial comparecieron los agentes que realizaron la inspección ocular del lugar de los hechos y otros que realizaron vigilancias e intervenciones telefónicas que implican a Imanol Salinas en los hechos. Además, explicaron que los miembros de este grupo son "sobradamente conocidos en Navarra por la Policía" y entre los ambientes radicales".

Durante la sesión de este lunes Octavio Martinicotena explicó que aceptó participar en estos hechos cuando se lo propusieron esa misma tarde en un bar porque estaba "enrabietado" y "caliente" por la detención de un amigo.

Confesó que había bebido "una o dos cervezas" y, "enrabietado" porque un amigo había sido arrestado, decidió participar sin saber exactamente en qué iba a consistir la acción. Una vez llegaron a la calle Mercaderes, "aparecieron tres o cuatro más" con bolsas y pudo ver "dos cócteles" molotov.

NO CONOCE AL RESTO

Después de que algunos cortaran con una cizalla las cadenas que ataban los contenedores, alguien le "dio la orden" de que cogiera un artefacto explosivo contra un cajero y así lo hizo. Octavio Martinicorena aseguró que no reconoce a sus compañeros de banquillo como miembros del grupo que participó en el ataque.

Esta es la versión que mantuvieron los otros cinco acusados, que han presentaron al tribunal coartadas diversas. Así, Iker Araguas explicó que se encontraba en Berañain (Navarra) conociendo a los padres de su novia; Francisco Javier Arina aseguró que participó en la manifestación previa al ataque pero ha dicho que después se fue a tomar "unos potes" con su cuñado, e Iñaki Marín, que estaba en Unanua (Navarra) recogiendo leña con su padre y sus tíos.

Finalmente, Ibai Moreno dijo que sufrió un ataque epiléptico esa tarde y estuvo en el hospital e Imanol Salinas explicó que se encontraba en Milán, hasta donde había viajado a primeros de septiembre de ese año con su novia para buscar trabajo.

DOS ESTÁN YA EN PRISIÓN

Además, Arina, Moreno y Salinas --los tres en libertad en la actualidad-- aseguraron que nunca han participado en actos de violencia callejera y varios de ellos explicaron que las confesiones que hicieron ante la Policía se debieron a malos tratos sufridos. Araguas y Marín se encuentran en prisión cumpliendo una condena por atacar a una patrulla de la Policía Foral navarra en el casco viejo de Pamplona la noche electoral de las últimas generales.

Al juicio no han acudido otros dos procesados en la causa: Artzai Santesteban, detenido el pasado mes de junio en Roma, y Joseba Fernando Asupurz, 'El Guindi', arrestado en marzo en Francia tras un tiroteo en el que murió un gendarme francés. Meses antes la Audiencia Nacional había decretado una orden de busca y captura en contra de ambos por no acudir al juicio por el ataque del 9 de marzo de 2008.

Según el fiscal, los hechos fueron cometidos el 13 de septiembre de 2008 en Pamplona, al finalizar una manifestación que había tenido como lema 'Stop Estado de Excepción. Demokrazia Nafarroarentzat, Euskal Herriarentzat'.

TAREAS PERFECTAMENTE DISTRIBUIDAS

Una vez acabó la marcha, sobre las 18.10 horas, nueve individuos "con las tareas perfectamente distribuidas", con el rostro oculto por capuchas y camisetas anudadas y guantes de látex, cortaron una calle próxima a la Plaza del Castillo de la capital navarra "cruzando e incendiando varios contenedores", que previamente habían separado de sus fijaciones mediante una cizalla.

Tras formar "una barricada", rompieron los cristales de dos sucursales bancarias de Caja Rural y Banesto, próximas entre sí, y las rociaron con líquidos inflamables para después lanzar artefactos explosivos de tipo casero. Como resultado del ataque, parte de la fachada y la calzada resultaron quemados y dos cajeros automáticos quedaron "inutilizados", provocando en total daños por más de 20.000 euros.

Después del ataque, arrojaron al fuego la cizalla y las mochilas que portaban y abandonan el lugar en grupo "rápidamente", tras haber desarrollado toda la acción en "apenas un minuto". El juicio se reanudará mañana.

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