ZARAGOZA, 6 Feb. (EUROPA PRESS) -
"Retocar lo menos posible la naturaleza" es la síntesis del mensaje que trasladará el Pabellón de Japón a los visitantes de la Exposición Internacional Zaragoza 2008, explicó el comisario de este pabellón, Takeshi Miyamoto, en respuesta a una pregunta sobre los trasvases de agua y que para contestarla recordó la actuación que tuvieron que hacer en la Expo de Aichi en el 2005, cuando para construir el propio recinto se encontraron con desniveles de terreno, de hasta 40 metros y con 13 pozos de agua, que hubo que preservar.
El pabellón de Japón en Expo Zaragoza 2008 es el de mayor escala de entre los 140 participantes. Se ubicará en el centro de la zona de países y comunidades autónomas, bajo el hilo conductor de "Armonía con el agua: sabiduría y técnica", que dará a conocer prácticas ancestrales, la visión de los japoneses sobre la naturaleza, al tiempo que el visitante podrá comprobar la fuerza y belleza de la naturaleza con una gran cascada.
Takeshi Miyamoto, relató que este espacio se articula en varias áreas. La Zona 'Vivir con el agua' será un espacio de encuentro con la sabiduría y técnicas ancestrales de Japón con la reproducción del final de la Era Edo, hace 200 años, poco antes de que este país alcanzara la modernización y cuando Japón ya se había orientado en la cultura del reciclaje.
En la Zona "El agua y la vida" se subraya que el agua es el origen de toda forma de vida. Se podrá pasear por un espacio de imágenes de agua y vida con la pretensión de que los visitantes se animen a avanzar en el compromiso de la conservación medioambiental. La arquitectura y la gastronomía japonesa estarán muy presentes en el pabellón que, además programará espectáculos, siempre con el hilo conductor del compromiso de Aichi 'Armonía con la naturaleza".
Se pretende que el contenido de este pabellón se perciba a través de los cinco sentidos la sabiduría de la naturaleza, que se manifiesta a través del agua, combinada con manifestaciones artísticas que provoquen emoción al visitante. "Todos somos habitantes de un único planeta con agua y todos debemos resolver el problema del agua", dijo Miyamoto.
El espíritu de convivencia con la naturaleza queda representado en los perfiles de olas que se recogen en los clásicos grabados Ukiyoe, donde se manifiesta la relación de estos habitantes con el agua y que se localizarán en la denominada "Vivir con el agua".
El día de Japón será el 21 de julio con un espectáculo que será un canto a los hombres que se enfrentan a los problemas del planeta. La semana de Japón (a finales de julio) ofrecerá un concierto con un coro de niños de todo el mundo. También para los más pequeños habrá un musical de las mascotas de Aichi (Morizo y Kiccoro) y Zaragoza (Fluvi). Desde la muestra de Aichi, las Exposiciones Internacionales han cambiado para dar paso a una "concienciación global y a un espíritu de cooperación conjunta en favor de nuestro planeta", señaló Miyamoto, al tiempo que indicó que es un mensaje que finalmente Japón transmitirá a todos los visitantes de Expo Zaragoza.
Respecto a la gastronomía adelantó que se presentará como parte de la cultura japonesa y con un precio medio por menú que oscilará sobre los 50 euros. El sushi estará en los menús "muy fresco y barato", aseguró Miyamoto para adelantar que elaborarán un té verde especial con aroma de naranja española y que bautizarán con el nombre de "media naranja". El comisario japonés recomendó degustar esta bebida porque después de numerosas pruebas comprobaron que la naranja española y el té verde casan muy bien para el gusto español y europeo.
En cuanto a los visitantes japoneses que se acerquen a Expo Zaragoza confió en que acudan al menos los 370.000 visitantes que viajaron a España el año pasado.
Japón es de lo pocos países que ha comenzado las obras de su pabellón porque se trata de uno de los más grandes y de mayor complejidad técnica debido a que reproducirá una cascada natural. Miyamoto apuntó que el coste total del pabellón ronda los 12 millones de euros. Asimismo anunció que a su país le gustaría corresponder en igual medida que España, cuando los Príncipes de Asturias visitaron la Expo de Aichi hace tres años.
