MADRID 22 Dic. (EUROPA PRESS) -
El abogado de la familia de Rocío Wanninkhof, asesinada en el año 1999 en Mijas (Málaga), reclamará que un jurado popular determine la implicación de Dolores Vázquez y Robert Graham en el asesinato de la joven después de que la Audiencia Provincial de Málaga condenase ayer a 19 años de prisión al británico Tony Alexander King como autor material del crimen "y reconociese la implicación de más personas".
El letrado, Marcos García-Montes, que ha ejercido como acusación particular en el caso contra el británico, anunció que esperarán a comprobar si la defensa de King o el fiscal presentan sendos recursos contra la sentencia y a la posterior decisión del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) para acometer nuevas medidas, aunque adelantó que se presentan "dos alternativas".
En este sentido, aseguró que "para encontrar a los otros asesinos no hay que buscar muy lejos" porque, a su juicio, "todos están en el procedimiento". Por ello, indicó que deberá celebrarse un juicio con jurado popular para determinar la responsabilidad de Dolores Vázquez, quien ya fue condenada por el crimen hasta la detención del británico, y Robert Graham, amigo del condenado que está en busca y captura por un Juzgado de Penal de Málaga por un delito de tráfico.
Además, insistió en la necesidad de que se incluyan como prueba las bragas de la joven, en las que aparecía sangre y ADN "de Dolores Vázquez". "Es un tema que hay que investigar y no puede quedar así", reiteró tras señalar que una alternativa para su investigación es la presentación de una querella.
"AL MENOS DOS PERSONAS MÁS"
García-Montes aseguró que lo más importante de la sentencia hecha pública ayer es que se considera "como hechos probados" que en el asesinato participaron "al menos dos personas más" y estima que "al menos una de ellas era una persona conocida por la familia y muy vinculada a ella". Así, subrayó que el móvil del crimen fue el de "la venganza, el resentimiento y el odio" y calificó los argumentos que rechazan esta posibilidad como "una cortina de humo y una barbaridad".
Por otra parte, anunció que interpondrá una recusación contra la juez de instrucción de Fuengirola (Málaga) y el Ministerio Fiscal porque, a su juicio, "han hecho el ridículo". Defendió que después de la sentencia y el veredicto del jurado popular "la fiscalía debería hacer autocrítica".
Por último, se preguntó si el asesinato de Rocío Wanninkhof podría haberse evitado en caso de que la policía británica "hubiera avisado" a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado españolas de su estancia en el país. Además, según él también "merece una reflexión" que no se remitiese "a todo el mundo" el perfil genético de la colilla encontrada en el lugar del crimen para evitar la muerte de la joven Sonia Carabantes, crimen por el que King fue también condenado a 36 años de prisión.
Por su parte, la madre de Rocío Wanninkhof, Alicia Hornos, se declaró "muy contenta" por el contenido de la sentencia, aunque manifestó su esperanza de que la investigación "siga adelante". "No me cabe la menor duda de que esas personas culpables tienen que pagar", destacó.
SENTENCIA CONDENATORIA
La Audiencia Provincia de Málaga condenó ayer a 19 años de prisión al británico Tony Alexander King como autor material del asesinato de la joven de Mijas, que desapareció el día 9 de octubre de 1999, concurriendo la circunstancia agravante de lugar despoblado, según la sentencia, a la que tuvo acceso Europa Press.
Además, le prohíbe acercarse a la familia Wanninkhof durante cinco años y le condena a indemnizar a la madre de la joven, Alicia Hornos, con 210.000 euros y a los hermanos con 42.000 euros. Por otro lado, en la sentencia, que se dicta ocho días después del veredicto del jurado popular, se le absuelve del delito de agresión sexual en grado de tentativa.
El magistrado-presidente del Tribunal del Jurado, José María Muñoz Caparrós, impone al acusado en esta resolución un año menos de cárcel de lo solicitado por el fiscal, atendiendo a la gravedad de los hechos que se sancionan y a la peligrosidad acreditada de éste, que ya tiene una condena firme de 36 años por la muerte de la joven Sonia Carabantes y que tenía numerosos antecedentes penales en el Reino Unido por agresiones y robos con violencia.
En la sentencia se concreta que los jurados entendieron que King fue el autor material, para lo que tomaron como base las declaraciones de dos agentes instructores que estuvieron en su confesión ante la Guardia Civil, quienes descartaron cualquier coacción al detenido, que dijo que fumó mucho en el lugar donde sucedieron los hechos, lo que justifica la colilla con su ADN encontrada. También se basaron en que llevó a los agentes a determinados lugares relacionados con el crimen.
El magistrado entiende que aún cuando el jurado estimó la presencia de al menos dos personas más en los hechos "ello no excluye la autoría material y fundamental del acusado", por lo que se rechaza un papel de cómplice, como pretendía la defensa. Asimismo, justifica que se incorporará al veredicto la participación de otras personas en que "el objeto del veredicto nace siempre de las calificaciones definitivas de las partes", y, en este caso, tanto la acusación particular como la defensa lo incluyeron.
Los jurados argumentaron en su veredicto esa posible participación de terceras personas, en primer lugar, en el pañuelo con sangre de la víctima, encontrado en el lugar donde ocurrieron los hechos, que tuvo que ser "ofrecido por una persona conocida"; en el reguero de sangre en el monte con lo que el cuerpo tuvo que ser transportado, en que fue puesto a propósito en un lugar donde la familia tenía intereses, lo que era conocido por el entorno familiar, y en una pegatina hallada en dicha zona, que supone que uno de los implicados "participó en las búsquedas".
El magistrado recoge en la sentencia la decisión de los jurados de que la muerte de Rocío fue consecuencia de la brutal agresión que recibió; y la estimación de la agravante de que los hechos se cometieron en un lugar despoblado y desierto en esos momento, para lo que los jurados se apoyaron en los testigos y en la inspección ocular; mientras que rechaza, como ya hizo el jurado, la atenuante de alteración mental, según los informes de los psicólogos y psiquiatras.