La organización seguirá manteniendo reuniones con otros grupos parlamentarios y el Gobierno para que los PGE reflejen sus peticiones
MADRID, 15 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) pidió hoy a los grupos parlamentarios popular y socialista en el Congreso de los Diputados la aprobación de la moción votada por unanimidad en la organización por la que solicita que hasta un 60 por ciento de la dotación de 5.000 millones del segundo Fondo Estatal de Inversión Local pueda ser destinada a la financiación de gastos relacionados con políticas sociales.
En declaraciones a los medios de comunicación a la salida de la reunión con los dos grupos, el presidente de la FEMP, Pedro Castro, que se reunió con el portavoz socialista en la Comisión de Presupuestos, Francisco Fernández Marugán, y el portavoz 'popular' en la Comisión de Administraciones Públicas, Rafael Merino, explicó que "nadie mejor" que los municipios saben "cuáles son las necesidades" de la población.
De este modo, indicó que su petición a los grupos políticos para la próxima tramitación del Proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) tiene que ver con "poder disponer de hasta el 60 por ciento de esos recursos", es decir, unos 3.000 millones de euros, del segundo Fondo de Inversión Local para políticas de tipo social.
En este sentido, Castro subrayó que, a partir de ahí, serían los ayuntamientos los que emplearían estos fondos para todos aquellos servicios que su sociedad necesite, una petición que también harán la semana que viene al resto de grupos parlamentarios en el Congreso.
Sin embargo, esta petición dista bastante de lo ofrecido inicialmente por el vicepresidente tercero del Ejecutivo y ministro de Política Territorial, Manuel Chaves, quien anunció que sería hasta un 15 por ciento la cantidad que podrá destinarse al mantenimiento de los servicios sociales, aunque esta misma semana se declaró dispuesto a aumentar este porcentaje.
Castro, que estuvo acompañado en la reunión por los miembros de la Junta de Portavoces de la FEMP --Ramón Ropero (PSOE), Fernando Martínez Maíllo (PP), Andrés Ocaña (IU), Lluís Guinó (CiU) y Joaquín Peribánez (PAR)--, también señaló que otra de sus peticiones ha sido disponer del "mismo trato" que las comunidades autónomas.
A este respecto, solicitó que las entregas a cuenta de los ayuntamientos se incrementen del 95 al 98 por ciento con el objetivo de tener "flexibilidad presupuestaria" para el endeudamiento. Según Castro, los municipios han perdido "capacidad recaudatoria por la caída de la actividad económica", pero al mismo tiempo no se pueden "endeudar", por lo que les resulta "imposible" elaborar presupuestos.
En la moción que aprobó la FEMP el mes pasado también se solicita "que en los Presupuestos Generales del Estado de 2010 y los de las comunidades autónomas se mantengan todas las partidas y conceptos presupuestarios que tradicionalmente se han destinado a las entidades locales, sin recortes ni supresión alguna".
También pide que durante la tramitación parlamentaria del Proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado se negocien las propuestas presentadas por la FEMP en la Comisión Nacional de Administración Local.
"BUENAS PALABRAS"
El presidente de la FEMP aseguró que tanto PSOE como PP han dado "buenas palabras", pero advirtió de que espera que "esas palabras se correspondan con buenos hechos", aunque recordó que el año pasado con la tramitación del proyecto de PGE para 2009 no tuvieron éxito en este sentido.
Por otro lado, Castro explicó que también espera "lo mejor" en la reunión que esta tarde mantiene la Junta de Portavoces de la FEMP en el Ministerio de Política Territorial, donde también exigiría que el 60 por ciento del Fondo de Inversión Local se destine a fines sociales.
Así, insistió en que su objetivo es que el Gobierno facilite a los municipios "la suficiente capacidad para que cada ayuntamiento pueda hacer aquellas cosas que le son más necesarias" y fundamentó esta afirmación en tres pilares: la eficacia energética, la investigación e innovación, y las políticas sociales.
Castro subrayó que esta es su intención y por lo que la FEMP está luchando, por lo que declaró que no tiene "un plan B" porque si lo tuviera no depositaría "ninguna confianza" en la aprobación de la moción. "No hay retroceso, vamos a por todas", concluyó.
