El fiscal-jefe reconoce que la operación relacionada con la Diputación de Lugo "se va alargando"

Actualizado: viernes, 19 mayo 2006 14:11

Los dos nuevos detenidos esta mañana se presentaron voluntariamente en la comisaría y falta por ejecutar una décima orden de apresamiento

LUGO, 19 May. (EUROPA PRESS) -

El fiscal jefe de la Audiencia Provincial de Lugo, Jesús Izaguirre, tras el registro practicado en el despacho de uno de los implicados en el supuesto fraude en la adjudicación de obras de la Diputación Provincial, reconoció que el operativo judicial y policial "se va alargando" más de lo previsto.

En cualquier caso, dijo confiar que la fase de registros concluya probablemente hoy y confirmó, asimismo, que son nueve los detenidos y que falta una persona por apresar dentro de esta operación, ya que permanece en paradero desconocido.

Igualmente, Izaguirre, que coordina la operación judicial, confesó desconocer dónde se pueda encontrar esta última persona que falta por detener, pero consideró que su apresamiento se podrá producir en las próximas horas.

Asimismo, corroboró que una vez que concluya la fase de registros, se iniciará la toma de declaraciones a los detenidos, que pasarán a disposición judicial.

REGISTROS

Durante la mañana de hoy fue registrado el despacho personal de uno de los implicados, Alberto Fernández, ingeniero jefe de Vías y Obras de la Diputación Provincial, al igual que un chalet de su propiedad y, posteriormente, se prevé una inspección de su despacho en la Diputación de Lugo.

El despacho del funcionario provincial en la empresa Senén Prieto está ubicado en la calle Ourense de la ciudad de Lugo y su registro fue supervisado por el fiscal jefe de la Audiencia Provincial, a quien acompañó el detenido. Fuentes de la investigación apuntaron que durante la jornada de hoy se efectuarán varias inspecciones más, para lo que el operativo se ha trasladado a una zona de chalets en la calle Portomarín.

Alberto Fernández Pereira y su esposa, Ángeles Prieto, fueron detenidos esta mañana, cuando se presentaron voluntariamente en las dependencias de la Comisaría de la Policía Nacional en Lugo, ya que ayer, cuando se inició la intervención judicial, se encontraban de viaje, según explicaron a los agentes. Una décima orden de apresamiento está aún sin ejecutar contra una persona que permanece en paradero desconocido.