El fiscal pide un millón de euros y 18 meses de prisión a un cabo por provocar una explosión que hirió a tres militares

Actualizado: lunes, 9 octubre 2006 12:48

VALLADOLID, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -

El fiscal militar pidió alrededor de un millón de euros y 18 meses de prisión para el cabo Rubén C.R, del Regimiento de Farnesio, por provocar una explosión con un cigarro en el interior de un carro acorazado y provocar lesiones a otros tres militares.

Según una información publicada por el Diario de Valladolid-El Mundo y recogida por Europa Press, la deflagración se produjo después de que el acusado comenzara a fumar en el interior del carro, en el que había una bolsa de plástico con suplementos de pólvora resultantes del ejercicio de tiro de mortero realizado el día anterior.

Por ello, el fiscal militar reclama 838.000 euros a favor del Estado por los daños ocasionados en el vehículo, que resultó totalmente siniestrado; 102.000 euros para la conductora, 24.500 euros para el tirador, y 2.800 para uno de los exploradores del carro aunque del pago deberá hacerse cargo el Consorcio de Compensación de Seguros y, como último responsable el Estado, dado que el acusado fue declarado insolvente.

El suceso se produjo el 8 de abril de 2003 cuando el acusado, que se encontraba en un vehículo VEC TC25 en el campo de San Gregorio de Zaragoza, contravino las órdenes e instrucciones de seguridad y comenzó a fumar en el interior del carro, para lo que previamente manipuló los sistemas de sensores de humo.

En el carro se encontraban además otros tres soldados también destinados en el Regimiento de Caballería Ligero Acorazado Farnesio 12 de Santovenia que sufrieron heridas de carácter grave tras la explosión.

Así, la conductora sufrió quemaduras de segundo grado en la cara y manos y de primer y segundo grado en brazos, muslos, glúteo y periné y tuvo que ser ingresada en la Unidad de Quemados del Hospital Miguel Servet de Zaragoza; el tirador sufrió quemaduras de segundo y tercer grado en la cara y ambas extremidades inferiores mientras que el tercer militar herido padeció quemaduras faciales de primer y segundo grado.