El Fiscal pide una multa de 90 euros a Diego Cañamero, por una falta de desobediencia a la autoridad el 28-F

SEVILLA, 10 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Ministerio Fiscal ha pedido una multa de 90 euros a Diego Cañamero, secretario general del Sindicato de Obreros del Campo (SOC), por una presunta falta de desobediencia a la autoridad durante las protestas realizadas por el colectivo coincidiendo con los actos del pasado Día de Andalucía debido a su rechazo a la concesión del título de Hija Predilecta de Andalucía a la duquesa de Alba, Cayetana Fitz-James Stuart.

Así lo informaron a Europa Press el propio Cañamero y su abogado, Luis Ocaña, al término del juicio de faltas inmediato celebrado esta mañana por la causa en el Juzgado de Instrucción número 5 de Sevilla. El caso se inició por una denuncia formulada contra la persona de Cañamero por la Policía a raíz de los incidentes ocurridos durante los actos de celebración del pasado 28-F en la ciudad. Aunque en un principio se le acusó de una supuesta falta contra el orden público dada la actitud que mantuvo presuntamente, finalmente ha sido enjuiciado por una falta de desobediencia a la autoridad, según el letrado.

La petición de la acusación pública es de 30 días de multa a razón de 3 euros por día, lo que suma un total de 90 euros, mientras que la defensa ha pedido la libre absolución del inculpado.

Según la denuncia policial, dada a conocer por el letrado, fue la actitud del secretario general del SOC la que provocó que los policías allí congregados tuvieran que hacer una carga policial contra los manifestantes. También se hizo constar que Cañamero insultó a un jefe policial "diciendo que la carga policial fue una imbecilidad", informó.

Pero a juicio del letrado, "si la carga la realizó la Policía, cómo va a ser el responsable Diego Cañamero", se preguntó. Para Ocaña, la actuación policial no estuvo justificada y, además, "allí hubo varias protestas pero sólo se pegó a los jornaleros".

En la vista celebrada prestó declaración, en primer lugar, un policía, seguido de la acusación y del propio Cañamero, que acabó abandonando la sala indignado al entender que el juez no le dejaba explicar su versión de los hechos. Según explicó, "quería explicar el proceso, como hizo el policía, y se me acusó de haber dicho imbécil a un jefe policial, pero yo aseguré que dije que la carga era una imbecilidad".

Así las cosas, Cañamero criticó que se sacaran estas cuestiones de contexto y llegó a preguntar al juez "si tratará igual a la duquesa de Alba --contra la que el sindicato ha interpuesto una querella--". Entonces, siempre según su versión de los hechos, "el juez me dijo que me iba a poner en la calle, a lo que yo respondí que no sería posible porque el que se marchaba era yo". Entonces, salió de la sala, no llegando a escuchar la declaración de un testigo de la policía que también había sido citado.

Para el secretario de los jornaleros, la causa se ha visto en un "juicio tan rápido para desviar la atención. Hay una presión política detrás".