Fiscalía mantiene peticiones de 2 años para alcalde de Arroyo (Valladolid) y otros dos imputados por doble contabilidad

VALLADOLID, 13 Jun. (EUROPA PRESS) -

La Fiscalía de Valladolid acordó hoy mantener peticiones de 2 años de cárcel por delito societario para el actual alcalde de Arroyo de la Encomienda, José Manuel Méndez, su socio en 'Recreativos Dema' José Presas y el que fuera director de dicha mercantil, Francisco Javier Rodríguez, al considerar probado que practicaron una doble contabilidad en la referida empresa entre los años 1998 y 2000, mientras que la acusación particular solicitó penas de 5,5 años de prisión para los imputados por la comisión cada uno de tres delitos societarios.

El juicio, que quedará mañana visto para sentencia en el Juzgado de lo Penal número 1 de Valladolid con la exposición de los informes de las partes, tuvo como principal protagonista al informático Tomás Rico, quien recibió el encargo de instalar los programas de contabilidad y gestión en 'Recreativos Dema' y que se convirtió en el mejor aliado de las acusaciones pública y privada, ya que a lo largo de su declaración mantuvo que dicha sociedad mercantil llevaba una doble contabilidad.

Así, el testigo explicó que en un principio el director de 'Dema', Francisco Javier Rodríguez, no le hizo ninguna indicación especial a la hora de instalar los referidos programas pero que a posteriori le pidió que buscara la posibilidad de que determinadas cantidades aparecieran en el apartado A, es decir, las que se iban a declarar, y otras en el B, aquellas que no iban a ser declaradas, así como que más tarde recibió el encargo de introducir una modificación en el programa de contabilidad al objeto de que la recaudación obtenida por la explotación de los futbolines y máquinas-grúa no se contabilizara al cien por cien.

El informático indicó que Félix Carrera, socio también en 'Dema' y quien el 12 de julio de 2001 presentó denuncia contra los tres acusados por considerar que le estaban 'ninguneando' y se estaban lucrando a su costa, le pidió en un determinado momento que le facilitara copia de dichos programas para probar sus sospechas. Aunque en un principio se negó, accedió finalmente tras ser convencido por Carrera y su abogado de que tal circunstancia estaba dentro de la legalidad y logró hacerse en febrero de 2000 con un CD-Rom y en mayo y julio del mismo año con dos disquetes que contenían todos los movimientos contables de la sociedad.

DOCUMENTACION VOLCADA EN CASA

Los soportes informáticos fueron introducidos en un ordenador personal que Rico tenía en su domicilio y allí, en presencia de Carrera y del abogado de éste, se procedió a imprimir en papel toda la información acreditativa de que en 'Recreativos Dema' se estaba practicando una doble contabilidad, algo que, según apuntó el testigo, "ya intuía desde hacía tiempo" no sólo por los programas específicos que le habían pedido que instalara sino también debido a las cosas que su novia y secretaria de la empresa, Julia Pérez, le había comentado tiempo antes, entre ellas que había alvaranes que no se facturaban.

El informático y la que hoy es su esposa, Julia Pérez, mantuvieron que el CD-Rom y los disquetes permanecieron en casa del primero hasta que fueron entregados por orden judicial y negaron que tales pruebas hubieran sido manipuladas. Ambos coincidieron también al señalar que inicialmente la asesoría externa Bolado se hacía cargo de la contabilidad en 'Dema' y de la presentación del correspondiente impuesto de sociedades pero que desde la puesta en marcha del citado programa informático las cuentas pasaron a llevarse en la propia empresa, en clara alusión a que de este modo los tres imputados tenían más margen de maniobra.

El testimonio más esperado, el del socio denunciante, Félix Carrera, fue precisamente el más inconsistente y falto de rigor, hasta el punto de que la juez llegó a recriminarle su falta de memoria y escaso conocimiento del funcionamiento interno de la empresa y le recordó que por su denuncia se están pidiendo a los tres acusados "penas nada desdeñables".

A lo largo de su declaración, Carrera situó el inicio del enfrentamiento con sus socios en el momento en que a través de algunos empleados conoció que 'Dema' estaba suministrando productos con descuentos excesivos, de entre el 20 y 30 por ciento, y a portes pagados a casi una decena de sociedades del mismo sector que se encontraban participadas por Méndez y Presas, algo de lo que tampoco era sabedor.

"Dema pagaba los gastos, nosotros tres avalábamos y ellos dos se llevaban el beneficio y las pesetitas", denunció Carrera, quien explicó que fue entonces cuando solicitó la colaboración del informático para obtener pruebas de las irregularidades que se estaban cometiendo en la empresa.

TRATADO COMO UN LEPROSO

El testigo aseguró que a partir de entonces su relación con los acusados se fue deteriorando, hasta el punto de que estos últimos, que desde el inicio le mantenían al margen de todas sus decisiones, empezaron a hacerle de menos. "Me dejaron un despacho cutre dotado de un infiernillo, un bloc de notas y dos bolígrafos y comenzaron a tratarme como si fuera un leproso", dijo Carrera.

Este, propietario de un pub en La Rondilla y con dinero ahorrado tras 11 años de trabajo en Suiza, declaró que sus socios recurrieron a él a la hora de constituir la sociedad buscando liquidez y presencia en los bancos, ya que, según advirtió, Presas tenía patrimonio pero no liquidez y Méndez, el hoy alcalde de Arroyo, estaba en una situación económica penosa.

"Cuando le conocí no tenía ni un duro e iba en un coche que se caía a cachos", recordó gráficamente el denunciante, quien incidió en que en un momento dado Méndez, con funciones hasta entonces de administrador en 'Dema', optó por contratar como director a Francisco Javier Rodríguez alegando que no tenía tiempo suficiente y que quería meterse en el mundo de la política y la construcción.

La que fuera responsable del departamento contable en 'Dema', Juana María Galindo, declaró en favor de los tres acusados y negó la existencia de una doble contabilidad, si bien su testimonio quedó en descrédito cuando el abogado de la acusación particular logró arrancarle que tan sólo dos días después de dejar dicha empresa empezó a trabajar en la sociedad municipal de gestión de suelo de Arroyo (EMUVA) cuyo Consejo de Administración preside el propio Méndez.

El juicio concluirá mañana con la exposición de los alegatos definitivos de las partes, tanto de las acusaciones pública y privada, que mantienen sus peticiones de pena para los tres acusados, como de las tres defensas, entre las que figura el ex juez de la Audiencia nacional y representante legal Javier Gómez de Liaño, en representación de Méndez.