VALLADOLID, 1 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía de Valladolid solicita penas que suman un total de 58 años de prisión y multas por valor de 135.000 euros para diez personas de etnia gitana que fueron detenidas en octubre de 2005 en la calle Neptuno, en el barrio de La Victoria, en el marco de la denominada 'Operación Planeta' contra el tráfico de drogas y que se saldó con la incautación de distintas sustancias que en el mercado habrían alcanzando un valor de casi 6.000 euros.
En su escrito de calificación provisional, la acusación pública pide penas de 6 años de cárcel y multas de 15.000 euros por delito contra la salud pública contra nueve de los detenidos, Luis Angel E.E, Aquilino E.E, Isabel B.C, Patricia F.E, Francisco Javier O.V, José B.C, Juan C.R, Raquel E.L y Aquilino E.C, así como otros 2 años a mayores para el primero de ellos por tenencia de armas prohibidas, otro año más para el segundo por atentado e idéntica pena para la tercera por el mismo delito.
Además, el fiscal imputa a un décimo imputado, Juan Carlos E.E, una falta contra el orden público y pide para él una multa de 540 euros, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.
Los hechos, que serán juzgados en la Audiencia de Valladolid a partir del próximo día 17 de abril, tienen su origen en las investigaciones que, bajo el nombre de 'Operación Planeta' se venían realizando sobre sendos pisos, un 1º derecha ubicado en el número 1 de la calle Neptuno y un 4º izquierda sito en el número 3 de la misma vía, donde se tenían sospechas de que sus moradores se dedicaban a la venta de cocaína, heroína y derivados del cannabis.
Así, tras intervenir entre los días 4 de julio y 25 de septiembre diversas sustancias a 12 consumidores cuando salían de los referidos inmuebles, el día 5 de octubre la Policía Nacional, con la preceptiva autorización judicial, practicó sendos registros domiciliarios que se saldó con la detención de once personas, entre ellas un menor de 14 años, y la incautación de 26,78 gramos de 'coca', 14,54 de heroína, 21,60 de hachís, 15,70 de cannabis, dos básculas electrónicas de precisión, diversos utensilios impregnados de droga, multitud de bolsas de plástico y 7.589 euros.
UNA PISTOLA DE FUEGO REAL
Además, la policía ocupó una pistola de fuego real con 46 cartuchos, supuestamente propiedad de Luis Angel E.E, tres vehículos (BMW, Peugeot 306 y Citroën Xantia), distintos teléfonos móviles y diversas agendas con información que se correspondían con la contabilidad de las sustancias vendidas, con referencia a nombres o motes de clientes, cantidad en gramos y precio.
Durante la operación que condujo a la detención de los imputados, uno de ellos, Aquilino E.E, al que se acusa de tráfico de drogas y atentado, llegó a detectar la presencia policial en la escalera del inmueble y reaccionó gritando 'agua, agua, agua' para advertir de ello a su mujer, Isabel B.C.
El primero llegó a empujar a un agente, que no resultó lesionado pese a romper con su cuerpo los cristales de una puerta, y forcejeó con otros tres policías, que tampoco sufrieron heridas, mientras que la esposa, que se encuentra imputada también por tráfico de drogas y atentado, se enfrentó a los funcionarios con dos palos metálicos con la finalidad de retrasar su actuación y ganar tiempo.
En el transcurso de los registros, otro de los acusados, José B.C, lanzó una mochila al patio de la calle Neptuno número 1 con la finalidad de que no fuera intervenida por los agentes, si bien el macuto fue recuperado por estos últimos, momento en el que comprobaron que contenía parte de la cocaína y heroína ya indicadas y otros efectos para su corte y distribución.
El único imputado al que no se responsabiliza de un delito contra la salud pública es Juan Carlos E.E, del denominado clan de los 'Aquilinos'. A éste se le acusa de una falta contra el orden público, ya que el día de los hechos se encontraba en la calle y tras percatarse del control policial trató de introducirse, sin éxito, en el número 3 de la calle Neptuno, ante lo cual espetó a los agentes la frase del siguiente tenor: "¡os voy a meter ochocientas puñaladas, ya nos veremos sin uniforme!"