LLEIDA, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio de Fomento podría tardar algunos días en concluir los trabajos de investigación en la zona de La Pobleta de Castellveí (Lleida), donde ayer se accidentó un helicóptero causando cuatro víctimas mortales.
Fuentes de Fomento explicaron a Europa Press que tres técnicos de la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil (CIAIAC) trabajan en la zona del municipio de La Torre de Capdella. Mientras dure esta primera fase de investigación sobre el terreno, los Mossos d'Esquadra se encargarán de custodiar los restos del aparato siniestrado.
Los cuatro fallecidos son dos técnicos de Red Eléctrica de España (REE), José Benítez, vecino de Castellbell i el Vilar (Barcelona), y José Manuel Iglesias, de Mollet del Vallès (Barcelona). El termógrafo, trabajador de la empresa Ingeniería de Instrumentación y Control SA (IIC), con sede en Madrid, es Fernando García Fernández. Finalmente, el piloto es Gilles Ferres, de nacionalidad francesa y vecino de La Massana (Andorra), que trabajaba para la empresa Helicópteros Catalunya SA (Helicasa), con sede en Sant Esteve de Palautordera (Barcelona).
El accidente tuvo lugar poco antes de las 14 horas de ayer en la zona de La Pobleta de Vellveí, cuando el aparato estaba realizando tareas rutinarias de reconocimiento de las líneas eléctricas de alta tensión.
Un portavoz del Ministerio de Fomento explicó a Europa Press que la Dirección General de Aviación Civil abrirá un expediente sancionador a la empresa Helicasa "por haber operado el helicóptero sin la preceptiva autorización" ya que, según la misma fuente, no había cumplido con todos los trámites para volar. El helicóptero era un modelo francés de unos 40 años de antigüedad Alouette-3, modelo Aerospatiale AS316B, con matrícula F-GPJF.
SUPUESTO FALLO TÉCNICO O HUMANO.
Por su parte, en declaraciones a Europa Press, el alcalde de la localidad, Josep Maria Dalmau, explicó que pese a que todavía no se conocen las causas exactas del accidente, se puede determinar que el aparato no chocó contra la línea eléctrica de alta tensión, ya que ésta no presentaba daños y el suministro eléctrico no se vio afectado. También se descarta que algún fenómeno meteorológico como el viento pudiera haber afectado la estabilidad del aparato, por lo que todo apunta a un fallo técnico o humano.
Dalmau explicó que el helicóptero cayó cerca de un pequeño monte y a unos 40 metros de una torre de alta tensión. El aparato se incendió, lo que quemó unos 15 metros cuadrados de pinos y matorrales.
Los trabajos de inspección aérea de las líneas con helicóptero se hacen de forma periódica para comprobar el estado de las mismas, siendo además el método más rápido y fiable para el buen mantenimiento de las instalaciones, según destacó Red Eléctrica en un comunicado.
La empresa Helicasa, propietaria del helicóptero, es una de las pocas compañías especializadas en estas tareas y realiza este tipo de trabajo para Red Eléctrica de forma habitual y "desde hace años", según confirmaron a Europa Press fuentes de REE. La compañía eléctrica también afirmó desconocer las causas que han provocado el accidente.
