El forense cree que la joven asesinada en Córdoba sintió un sufrimiento físico y psíquico "tremendo" al verse amenazada

Actualizado: jueves, 20 abril 2006 17:24

CORDOBA, 20 Abr. (EUROPA PRESS) -

Los médicos forenses que examinaron el cuerpo de Beatriz García, de 19 años, a quien su ex novio Raúl C.F., de 23 años, supuestamente apuñaló más de 100 veces, en Córdoba, declararon hoy durante el desarrollo de la vista oral que la víctima "tuvo que pasar un sufrimiento físico y psíquico doloroso tremendo debido al número de lesiones y ver amenazada su vida".

Los expertos afirmaron que la joven "tuvo que saber que la estaban matando porque durante la agresión la sangre brotaba constantemente de su cuerpo, notó que la estaban matando, por lo que sufrió horriblemente".

Durante las declaraciones de los forenses, que explicaron detalladamente mediante positivas cada una de las heridas del cuerpo de la fallecida, el acusado comenzó a llorar y prefirió darse la vuelta para no ver las imágenes del estado en el que quedó la joven. Según explicaron los especialistas, más del 90 por ciento de las heridas están en la parte superior, concentradas en zonas vitales, destacando una puñalada que afectó a la vena yugular, que fue seccionada completamente, al penetrar tres centímetros.

No obstante, detallaron que las heridas mortales (tres en el pulmón, una en la vena yugular y otra en el ventrículo izquierdo) fueron de las últimas y existían más de 50 puñaladas anteriores, porque en caso contrario "en un tiempo corto la víctima se hubiera desvanecido". Los forenses explicaron además que de las heridas se puede deducir que el agresor "impidió la huida" de Beatriz, por lo que tuvo "inmovilización".

Por su lado, el médico que atendió a Raúl en el Hospital Reina Sofía de Córdoba el mismo día de los hechos para curarle los cortes que sufrió en las manos afirmó que el procesado entró "consciente y orientado, sabía dónde estaba y entendía perfectamente con quién estaba hablando y dónde se encontraba".

Asimismo, señaló que no encontró en él ningún tipo de trastorno, pero sí fetor etílico, lo que no indica embriaguez, ya que, según el testigo, "no había otros síntomas de intoxicación etílica".

También acudieron a declarar hoy el hermano y la madre de Raúl, quienes explicaron que el padre de Raúl sufre desde joven esquizofrenia paranoide. Además, el hermano calificó al joven como un hombre "peligroso, que estaba grave y no sabía lo que hacía", porque incluso en una ocasión llegó a atropellarlo con su coche sin pararse para atenderlo.

El hermano insistió en que Raúl está enfermo y que tenía problemas para dormir por el consumo de 'tripis', llegándole incluso a decir en una ocasión que estaba "pillado y que a veces es como si oyera cosas". El hermano dijo también que cuando estaba saliendo con Beatriz veía que "los amores le estaban comiendo, ella no le dejaba vivir".

Por su parte, la madre manifestó que su hijo "a raíz de la bebida se ponía agresivo y que le ha notado en varias ocasiones síntomas parecidos a los de su padre y que últimamente veía en la televisión películas de miedo con el volumen muy alto".

Tras las declaraciones hoy de los forenses, psicólogos y psiquiatras expertos en violencia de género que han examinado al acusado, mañana continuará el juicio con la exposición de los informes de los letrados que llevan el caso.