BARCELONA, 15 Dic. (EUROPA PRESS) -
El líder de ICV-EUiA y consejero de Interior, Relaciones Institucionales y Participación, Joan Saura, advirtió hoy de que "las cosas no van bien" en la negociación de los traspasos de competencias que están sobre la mesa y que debían concretarse en una reunión de la Comisión Bilateral Estado-Generalitat este mes de diciembre, por lo que reclamó al Gobierno que "se aceleren las negociaciones".
Después de que ayer la vicepresidenta del Gobierno, Maria Teresa Fernández de la Vega, tachara de "rumores" las informaciones sobre el retraso de la cumbre y asegurase que se celebrará el 27 de diciembre, Saura puso hoy de nuevo en duda que esa convocatoria pueda producirse, avisando de que "sólo se producirá si lo acordado tiene contenido".
"Ha habido retraso y una lectura restrictiva por parte del Gobierno central de preceptos que literalmente se dicen en el Estatut", reprochó Saura, e insistió: "Aunque estamos negociando mucho, las cosas hasta ahora no van bien".
"Todos estaríamos encantados de que esto fuera bien y que rápidamente pudiéramos hacer una reunión bilateral donde acordásemos traspasos con contenido, pero no va bien y hemos tenido mucho tiempo para que vaya bien", alertó.
Saura dijo "esperar y desear" que la negociación "se acelere en los próximos días" para poder celebrar la reunión en el plazo previsto, pero reiteró que el Gobierno "quiere una comisión con contenido" de la que "se pueda salir diciendo que se ha dado un paso adelante".
En este sentido, dijo que "menos mal" que el Estatut "es largo" y fija las transferencias de "Cercanías, inmigración e inspección de trabajo", porque si no estuviera escrito "no saldrían adelante" estos traspasos.
Fuentes de la Consejería de Relaciones Institucionales explicaron a Europa Press que las palabras optimistas del Gobierno central no se han concretado aún hoy en acuerdos concretos, por lo que las negociaciones siguen estancadas en estos tres traspasos, que son los más importantes.
Las mismas fuentes señalaron que sólo sería necesaria una directriz política desde lo alto de cada ministerio implicado para llegar a un acuerdo y consideraron que el retraso en la fecha de la cumbre no sería problema si sirve para alcanzar pactos satisfactorios.
