MADRID, 31 Mar. (EUROPA PRESS) -
La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, aseguró hoy que el Ejecutivo actuará "con total rotundidad" cuando se acrediten indicios de delito en la causa que se sigue contra el Ayuntamiento de Marbella por corrupción.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros de hoy, De la Vega aseguró que el presidente y los ministros no trataron lo que está sucediendo en la localidad malagueña. Ahora, recalcó, es el momento de que trabaje la policía y la Justicia. "Es preciso dejarles trabajar para que puedan culminar su tarea en esta primera fase, que tengamos algunos datos", reclamó.
Una vez que los datos se vayan confirmando, "que tengamos un pronunciamiento judicial e indicios de posible delito o apariencia de posibles delitos", la vicepresidenta aseguró que el Gobierno será firme, aunque no adelantó ninguna medida.
"Primero, para perseguir a los delincuentes y que el peso de la ley caiga sobre ellos, y también, para garantizar a los ciudadanos de Marbella que cuenten con servicios públicos adecuados y puedan ejercer sus derechos democráticos sin restricción", aseguró.
De la Vega subrayó que el Ejecutivo socialista es "el Gobierno de la transparencia" y que "ni tolerará ni mucho menos amparará jamás comportamientos corruptos, que quede bien claro". Corrupción, quiso aclarar la vicepresidenta, que "resulta ajena a la inmensa mayoría de servidores públicos, sobre los que recae siempre la sombra de la sospecha causando daño irreparable a ellos y a la calidad de la democracia".
Fuentes del Gobierno explicaron que la disolución del Ayuntamiento por la Administración central abriría un proceso demasiado largo teniendo en cuenta que el año que viene ya hay convocadas elecciones municipales en el país. Las mismas fuentes añadieron que el camino sería que una comisión gestora gobernase el consistorio marbellí hasta las elecciones locales de 2007.
