PALMA DE MALLORCA, 16 May. (EUROPA PRESS) -
La vicepresidenta del Gobierno balear, Rosa Estaràs, reclamó hoy que el Estatut de Autonomía incluya el traspaso de competencias sobre la gestión de los permisos de trabajo y de residencia de la población inmigrada a las islas, materias que en estos momentos competen al Ejecutivo central y que previsiblemente así seguirá siendo con la aprobación del texto definitivo en el Parlament balear el próximo trece de junio.
Así lo manifestó Estaràs en respuesta parlamentaria a una pregunta formulada por el Grupo PSIB y dirigida formalmente a la consellera de Inmigración y Cooperación, Encarnación Pastor, que se abstuvo de contestar. En este sentido, la diputada socialista Aina Rado criticó que el Govern "va por libre", al señalar que, por un lado, Pastor en su gestión promete "unas cosas", que luego no se corresponden con las actuaciones finales del equipo de Gobierno.
Rado denunció que la consellera "se atreva" a afirmar que a Baleares pueden venir todos los inmigrantes que lo deseen, y luego el presidente del Govern, Jaume Matas, diga que "deben seleccionarse los inmigrantes que llegan a Europa". "¡Aclárense!, porque aquí cada uno va por libre y esto no es serio ni riguroso", espetó la diputada.
Por su parte, Estaràs criticó que el Gobierno central anuncie un tercer plan de choque sobre inmigración, porque, a su juicio, demuestra que los anteriores no resultaron adecuados, al tiempo que lamentó que todo lo que Rado denunció hoy en el pleno en materia de inmigración sea lo que "ella prometió cuando fue consellera con el Pacte de Progrés".
Estaràs opinó que la Ley de Extranjeria de José Maria Aznar fue la "única normativa útil" en materia de inmigración, y respaldando la gestión de la consellera, indicó que es ahora, y no antes, "cuando desde el Ejecutivo autonómico se está haciendo algo en materia de inmigración".
De esta manera, Pastor defendió su actuación al frente de la Conselleria y detalló que de tener competencias plenas en materia de inmigración "nunca desarrollaría políticas de espaldas a la Unión Europea; ni tomaría decisiones unilaterales sin considerar a los Ayuntamientos; ni haría un proceso de regularización en poco más de 60 días, dejando a muchos inmigrantes al margen; ni actuaría fomentando el efecto llamada y propiciando el fraude, como ha hecho el PSOE", afirmó.
Una enumeración de gestos que para Rado sólo demuestran que la consellera es una "esclava de sus palabras y de sus manifestaciones", y le recriminó, en este sentido, que haya repetido "hasta cansarse" que de tener las competencias "adoptaría soluciones inmediatas para los inmigrantes irregulares a los que concedería de forma automática el permiso de trabajo". Rado pidió a Pastor que "no mienta ni a los inmigrantes ni en el Parlamento y que sea más precisa con sus palabras".
La diputada socialista terminó su intervención señalando que cuando Aznar estaba en el Gobierno a los inmigrantes irregulares "se les metía en un avión y se les expulsaba, y sí, quizás para el PP ello signifique solucionar el problema", sostuvo. Así, remarcó, por último, que el Govern "no tienen autoridad moral de ningún tipo para oponerse al proceso de regularización llevado a cabo por el Ejecutivo central, porque cuando el PSOE llegó al Gobierno, en España había un millón de extranjeros irregulares".
