El Gobierno catalán garantiza que la nueva ley de consultas respetará la Constitución

BARCELONA, 23 Feb. (EUROPA PRESS) -

La vicepresidenta de la Generalitat catalana, Joana Ortega, ha garantizado este miércoles que la nueva ley de consultas que quiere impulsar el Gobierno catalán en esta legislatura será plenamente compatible con la Constitución y con la sentencia del Tribunal Constitucional (TC) sobre el Estatut.

"Queremos impulsar desde el Govern una norma --sobre consultas-- con el máximo consenso posible, y sin perjuicio de pensar en todo momento en la corrección constitucional y estatutaria", ha sentenciado en una intervención ante el pleno del Parlamento catalán.

Asimismo, ha recordado que el Estatut otorga competencias exclusivas a Cataluña en materia de consultas, y ha criticado que la actual ley que las regula, suspendida por el Alto Tribunal, era "poco ambiciosa e incompleta".

En este sentido, ha anunciado que el Gobierno catalán es partidario de hacer leyes que "no necesiten el permiso de Madrid" para hacer cosas de tanta importancia, según ha dicho, como es consultar la opinión a la ciudadanía.

"FIJACIÓN ENFERMIZA"

En respuesta a una interpelación de SI, la vicepresidenta ha criticado la "fijación enfermiza" que la coalición que lidera Joan Laporta tiene con las consultas, y especialmente en recriminar a la consejera de Justicia, Pilar Fernández Bozal, que liderase el recurso de la Abogacía del Estado contra la consulta de Arenys de Munt (Barcelona).

Ortega ha lamentado que los independentistas insistan tanto en criticar a Bozal por su paso por la Abogacía del Estado, cuando entre sus filas cuentan con el diputado Alfons López Tena, ex vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).

El diputado de SI Uriel Bertran ha asegurado que Bozal no puede defender los intereses de los catalanes tras el recurso que presentó, y ha sentenciado que el "tono alarmista y contundente que utilizó --en el recurso-- la incapacita para ser consellera".

Asimismo, ha lamentado que el Gobierno de Artur Mas, con postulados como el de Bozal o con los recientes fichajes de ex cargos del PP, ha dado un giro hacia "posiciones españolistas" que van en contra de los intereses de Cataluña.