ZARAGOZA, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Defensa, José Antonio Alonso, afirmó hoy que "el Gobierno --central-- no tiene ninguna evidencia de que se hayan cometido ilegalidades en nuestro territorio nacional", en alusión a los posibles vuelos realizados por agentes de la CIA norteamericana para realizar traslados ilegales de presos islámicos utilizando instalaciones aeronáuticas de diversos países, que investiga el juez de la Audiencia Nacional Eliseo Moreno.
"Nunca comento decisiones judiciales", prosiguió el titular de Defensa, quien remarcó que Estados Unidos es un país "aliado y amigo" y señaló que "España es un Estado de Derecho que activa sus mecanismos de investigación cuando hay denuncias de esta naturaleza", en este caso relativas a la posible utilización, por parte de la CIA, del aeropuerto mallorquín de Son Sant Joan en las mencionadas operaciones.
De visita en la Base Aérea de Zaragoza, José Antonio Alonso recordó que el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, tiene previsto comparecer ante el Parlamento de la Unión Europea (UE), mientras que el Congreso acogerá sendas comparecencias del secretario de Estado de Seguridad, del Ministerio del Interior, Antonio Camacho, y el secretario de Estado director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Alberto Saiz.
Por otra parte, José Antonio Alonso garantizó la "absoluta seguridad" de los vuelos de transporte de militares y materiales del Ejército de España. "Todos nuestros soldados son y van a seguir siendo transportados por una empresa española de transporte que ha ganado el concurso respectivo", desmintiendo así que vaya a hacerse cargo empresa extranjera alguna.
Sobre la participación de soldados españoles en una misión en la República Democrática del Congo, el titular de Defensa comentó que "es una misión que obedece al esquema del Gobierno", es decir, que se trata de una respuesta a un requerimiento de la Organización de Naciones Unidas (ONU), cuenta con la autorización de las Cortes Generales y su objetivo es "noble y solidario", ya que se trata de garantizar el orden durante la celebración de las elecciones legislativas en este país "clave" en el centro de África.