BARCELONA 15 May. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Economía y Finanzas de la Generalitat de Cataluña, Antoni Castells, condicionó hoy la creación de un nuevo Gobierno de coalición en Catalunya en el que participe el PSC a que haya "un liderazgo que no pueda ser puesto en cuestión día sí día no" por otras fuerzas políticas que formen parte del equipo de gobierno.
Subrayó que "cualquier cuestión de futuro pasa por tener un resultado en el que salga reforzado el PSC y un bloque central inequívoco que pueda marcar el camino, dirigir el proceso", aunque explicó que "ya llegará el momento en que hablemos de todo esto", agregó.
Castells afirmó que "volvería a suscribir un proyecto estratégico ilusionante de hacer una política progresista y catalanista en Catalunya", aunque primero "hemos de aprender de nuestros errores". El conseller hizo estas declaraciones en una entrevista concedida a TV3, recogida por Europa Press.
Asimismo, recordó que un gobierno de coalición es una "experiencia nueva" en Catalunya y que el tripartit vivió un contexto "muy complicado porque ha habido este gran objetivo que ha sido el Estatut, que ha provocado todo tipo de tensiones".
"Sobre todo", prosiguió, estas tensiones se han dado "en las relaciones de Catalunya y España que, quiera o no, se han proyectado sobre la posibilidad de actuar con tranquilidad desde Catalunya".
En relación a un posible pacto PSC-CiU tras las elecciones, el titular de Economía y Finanzas de la Generalitat dijo que no es una posibilidad que esté "encima de la mesa".
EL PSC DECIDIRÁ "SIN FISURAS" SOBRE LA SUCESIÓN DE MARAGALL.
En relación a la candidatura de Pasqual Maragall al frente del PSC en las próximas elecciones autonómicas o su posible sucesión por otro candidato, Castells quiso dejar claro que desde el PSC "se harán las cosas sin fisuras, todos irán en la misma dirección".
También negó que Maragall le ofreciera ser 'conseller primer' y aseguró que "no es una cuestión que esté encima de la mesa" que él suceda a Maragall como candidato del PSC. "Primero hemos de dejar que Maragall tome las decisiones que deba tomar, yo estaré a su lado", añadió.
ESTATUT DE ZAPATERO Y MARAGALL.
Por otra parte, Castells aseguró que "la historia dirá que éste es el Estatut de Maragall y Zapatero, como el del 32 fue el de Macià y Azaña", aunque también será "el de Mas y el de Saura y, aunque ellos no quieran aparecer en las firmas, en parte también el de Carod".
Asimismo, se mostró "convencido" de que habrá un "porcentaje importante" de participación en el referéndum y rechazó dar una cifra para no quedar "encadenado" a la misma, aunque marcó el referéndum sobre el Estatut de 1979 como "referencia" para la participación.
El conseller dijo que, "sin que quisiéramos", el debate del Estatut "ha envenenado de tal manera nuestra relación con otros territorios de España en muy buen aparte por una campaña totalmente irresponsable contra Catalunya que algunos han generado por intereses políticos".
Por ello, opinó que los ciudadanos de Catalunya "se deben sentir especialmente motivados" para votar en el referéndum, opinó. "Nos jugamos mucho como país" y "ahora no se entendería que los ciudadanos de Catalunya se desentendieran" del nuevo Estatut, agregó.
'NO' DE ERC "POCO EXPLICABLE.
Por otra parte, Castells comentó que el 'no' de ERC fue un "factor decisivo" para su salida del Gobierno catalán y consideró que, si bien el 'no' del PP es "consecuente con un proyecto político", en el caso de ERC es "poco explicable", porque "supone un avance, una mejora sustancial a lo que tenemos".
Asimismo, opinó que fuera de Catalunya el 'no' "lo capitalizará el PP" y será leído como un 'no' al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para "desgastar" y "demostrar que se ha equivocado".
"SERÍA MALO" QUERER REVISAR EL NUEVO ESTATUT.
Por otra parte, Castells consideró que "sería muy malo" y "realmente nocivo" que algunas fuerzas políticas quisieron que el nuevo Estatut sea "objeto de revisión" tras su aprobación porque "lo que se aprobó en el Parlament iba más allá o decía unas cosas diferentes".
El nuevo texto, según Castells, es "un magnífico Estatut" fruto de un pacto entre "lo que salió del Parlament de Catalunya y lo que querían la mayoría de las Cortes Generales", que debe "abrir una larga etapa de estabilidad política en Catalunya".
Además, sostuvo que desde Catalunya "tendremos fuerza para exigir a los otros el cumplimiento de este pacto si nosotros no lo ponemos en cuestión al día siguiente".
EL GOBIERNO SIGUE "A PLENO RENDIMIENTO".
Castells también defendió la situación de estabilidad del actual Gobierno y, en relación a las referencias del ex conseller de Comercio, Josep Huguet (ERC), sobre la revolución, dijo que "por supuesto que no hay contrarrevolución, como antes no había habido revolución". "Este país quiere reformas y reformas serias", añadió.
"Huguet esperó al día que cesaba para hablar de su espíritu revolucionario, me parece bien", agregó.
El titular de Economía lamentó las referencias del presidente de ERC, Josep Lluis Carod-Rovira, sobre la influencia de determinados poderes económicos en cuestiones como las concesiones de la TDT, la telefonía móvil, el futuro de Al-pi, la oficina antifraude o el Plan Territorial Sectorial de Equipamientos Comerciales.
"Me produce mucha tristeza oír declaraciones de este tipo", aseguró, y se preguntó si "¿Hay que buscar claves ocultas en la decisión del president de la semana pasada? Está bastante clara".
Asimismo, consideró que "se descalifica por sí sólo" el que "se permita extender una sombra de duda sobre la honestidad de los compañeros de Gobierno de los miembros de su partido me parece un poco triste".